MENORCA - EL CONSELL RENUEVA POR CINCO AÃ'OS EL ALQUILER DE LA NAVETA DES TUDONS.

Naveta des Tudons, en Ciutadella, incluida en la candidatura

Redacción Menorca24/04/22 3:59
TW
3

Las alianzas internacionales que mantiene la Federación Rusa y su mandato hasta 2023 como miembro del Comité de Patrimonio Mundial de la Unesco amenazan con prolongar la parálisis en la elaboración de la lista de sitios que pasan a ser Patrimonio Mundial, de la que aspira a formar parte la Menorca Talayótica.

El boicot de los países europeos, en minoría dentro del comité formado por 21 miembros de los estados partes de este órgano, ha retrasado sin próxima fecha de convocatoria la reunión que estaba prevista en la ciudad de Kazán, del 19 al 30 de junio, pero no ha conseguido reunir el apoyo de los dos tercios de dicho comité (14 miembros) para retirar a Rusia la capitalidad del evento por su invasión de Ucrania.

Noticias relacionadas
La Menorca Talayótica entra en su fase decisiva

La candidatura de la Menorca Talayótica deberá esperar: aplazada la reunión decisiva de la Unesco

De este modo, el único acuerdo hasta la fecha es que después del verano, sin una fecha fijada todavía, se celebre un encuentro en el que, según informan diversos medios, se debatirá en público la situación y cada Estado miembro defenderá sus argumentos, a favor o en contra, de la celebración en Rusia y con presidencia rusa de la reunión del Comité de Patrimonio de la Unesco. Ese debate se celebrará probablemente ya en otoño.

La Federación Rusa ha contado con apoyos dentro del comité de países que tienen representación como Argentina, Arabia Saudí, India, Sudáfrica y Tailandia. Todos expiran el mandato en 2023 salvo Argentina e India que lo mantienen hasta 2025. El pulso contra Rusia dentro de la Unesco, con presencia de solo cuatro países europeos, Bélgica, Bulgaria, Grecia e Italia no ha tenido el efecto deseado. Países de América Latina, África y Asia se posicionan como neutrales y entienden las dificultades de acudir a Rusia en el contexto actual.

Así las cosas, el comité extraordinario debe decidir si hay reunión en otro emplazamiento y bajo otra presidencia, pero se teme que Rusia insista en mantenerse como anfitriona y haga valer sus alianzas estratégicas. Otra opción es que en 2022 no se celebre la reunión del Comité de Patrimonio Mundial y se haga una doble sesión al año siguiente, ya será en 2023.