El galerista Jeremy Lamont combina su oferta con cuadros de pintores locales y foráneos.  | Paco Sturla

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The Flat es una nueva galería de arte ubicada en Maó que inició su andadura a principios de año bajo la dirección de su propietario el británico Jeremy Lamont, un antiguo DJ que pinchó en las mejoras discotecas de Europa y en otros países. Ahora regenta esta nueva galería que se suma a una larga lista de negocios que han seguido el ejemplo de las galerías Hauser & Wirth y Cayón.

Jeremy Lamont (Cambridge, 1969) realizó a los 17 años estudios de arte y diseño en su ciudad natal, pero su vida dio un giro de 360 grados cuando decidió ejercer de pinchadiscos y en los años noventa dio buena cuenta de ello en las mejores discotecas europeas, entre ellas Space,Amnesia y Pachá. «En aquellos años también ejercí como productor musical y de conciertos, viajé por muchos países y conocí a muchas personas, entre ellas a muchos artistas y pintores», recuerda.

En la última década del siglo XX vivió con su esposa en Barcelona, Valencia y Eivissa, pero recorrieron todo el litoral mediterráneo peninsular, desde la localidad catalana de Roses hasta alcanzar Cádiz en busca de un lugar para quedarse a vivir. Al final, muchos años después, en noviembre de 2021 recalaron en Menorca y quedaron enamorados de la Isla.

Durante los últimos dos años y medio Lamont ha gestionado su propia tienda de arte en línea, gracias a la cual se ha dedicado a la venta de obras de arte digitales, las conocidas como NFT, que se definen como un certificado digital que garantiza el original de una obra, cuadro u objeto, aunque esta puede reproducirse miles de veces. «Antes se vendía mucho en la tienda online las copias de arte digitales, los precios subían continuamente, pero en la actualidad el valor de las criptomonedas está muy bajo, por lo que también opté por abrir una tienda física», afirma.

En efecto, el pasado mes de enero abrió sus puertas The Flat, con una exposición inaugural a cargo del pintor Eduardo Bermejo, cuyos cuadros permanecerán a lo largo del año. Además, Lamont también apuesta por los artistas menorquines, por lo que en las paredes de la galería cuelgan obras de pintores locales, junto a otros. En estos momentos, el visitante puede contemplar obras de los siguientes autores: Hombrelópez, David Monrós, Pol Marban, Theresia Malaise, Vincent Russell, Christina Benejam, Ottograph Amsterdam, Siscu Casanovas, Tesa Pons Livermore, Misko, 3-DKE, Antonio Moyano, Toni Riera, Yolanda Carretero, Joan Puig Bagur, Karol Bergeret García, Nuria Román, Justin Case, El Rey de la Ruina, Kathryn Ross, Eden Burdett y Liz Spooner.

Por otra parte, la semana pasada, concretamente el 29 de junio, The Flat inauguró una nueva exposición con veinte obras del croata Mario Keglevic y la finlandesa Hanna Ellola, que podrá visitarse hasta el próximo día 25 de julio. Mario pinta paisajes con una gran precisión de los detalles, de los árboles y de sus hojas, además de las flores, así como de    algunos interiores de viviendas en donde de sus paredes cuelgan cuadros con paisajes. Por su parte, Hanna se decanta por una pintura más simbólica, alejada del naturalismo, sobre todo para que la pintura pueda ser una ventana a otra dimensión. En este sentido, los cuadros están pintados al óleo pero de gran calidad y en el caso de Mario cuando pinta sobre madera previamente lija la superficie para que esté más fina y pueda plasmar con mayor detalle sus creaciones.

Lamont señala que los cuadros están a la venta a mitad de precio mientras dure la exposición, «por ejemplo, el precio de uno de los cuadros de gran formato de Mario es de 30.000 euros y ahora puede conseguirse por 15.000 euros. Pienso que algún día sus cuadros estarán en un museo y costarán millones de euros», sentencia el galerista.