Expectativas. El sector confía en mejorar su situación con la fusión - Archivo

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La nueva Cooperativa Agraria i Ramadera de Menorca tiene previsto iniciar su andadura a partir del 1 de enero, después que el sábado, los socios que participaron en sendas asambleas de las dos asociaciones que integran la nueva entidad, dieran luz verde a la fusión.

La noticia quedó validada pasada la medianoche del sábado en la reunión que se celebró con los miembros de la Cooperativa Sant Guillem i Santa Escolàstica de Ciutadella. Un encuentro que concluyó con una votación claramente favorable a la fusión, con 79 votos a favor, 5 en contra y contabilizándose 6 abstenciones.

Este trámite seguía al producido horas antes entre los socios de la Cooperativa de Sant Llorenç de Alaior, donde el apoyo a la unión fue unánime, con 56 votos partidarios y ninguno en contra.

Como destacaron los presidentes de ambas asociaciones, Carlos Taltavull y Bartomeu Pons, ésta es una decisión que persigue dar viabilidad a la actividad agraria. Y es que según Taltavull, el campo menorquín "vive este momento con mucha preocupación, es el momento más delicado que nunca se ha vivido". Por eso, pronosticó que "si no mejora la situación, la continuidad del campo será difícil tanto con fusión como sin ella". A pesar de todo, apuntó que "no podemos prometer resultados, pero sí ilusión y mucho trabajo".

Ante las dudas que pueda generar la fusión entre los socios, el presidente de la cooperativa alaiorense, Bartomeu Pons, aseguró que "no notarán ningún cambio, las oficinas de Alaior seguirán funcionando igual que hasta ahora, podrán dirigirse a nosotros del mismo modo".

Nuevo organigrama

La Cooperativa Agraria i Ramadera de Menorca tendrá un Consejo Rector formado por cinco miembros de cada asociación, además del presidente. Así, la presidencia recae en Carlos Taltavull, mientras que Bartomeu Pons ostentará el cargo de vicepresidente. Luego, el secretario será Antoni Sintes, miembro de la cooperativa de Alaior, y la tesorería será para Miquel Bosch Cursach, de Ciutadella.

A efectos fiscales, el domicilio social será el de la cooperativa ciudadelana, aunque como confirmó Pons, esto no supondrá ningún cambio en las dependencias de Alaior.
Así, según Taltavull y Pons, ahora se inicia un periodo de transformación que debe llevar a la nueva asociación a alcanzar nuevos objetivos que permitan mejorar la viabilidad de la actividad agraria y ganadera de la Isla.