Los artistas convirtieron el corazón de la ciudad en la gran fiesta del arte, como una manera diferente y original de acercar el arte al público. De hecho, es la cita del arte en la Isla que más artistas reúne en directo. El público pudo descubrir cuál es el proceso creativo y la técnica de sus pintores, grabadores, escultores y ceramistas preferidos, además de entrar en contacto con artistas desconocidos de disciplinas como el arte visual, el bodypainting o las performances, entre otras manifestaciones artísticas.
Diálogo con los artistas
La gente pudo dialogar y realizar preguntas a pintores de la talla de Matías Quetglas, Carlos Mascaró o Zulema Bagur, entre muchos otros, o de artistas emergentes como Pol Marbán o Març Rabal, por señalar algunos. El objetivo de popularizar el arte, de sacarlo de los talleres y de las galerías, es una idea que surgió de Josep Bagur Corominas, con la colaboración de la escultora Mila Aedo. Este año, la zona de exposición de arte en directo se ha tenido que ampliar, para evitar las aglomeraciones del año pasado, se trata de un dato que demuestra que la Nit d'Art de Maó es un evento que va a más y se consolida por su original y atractivo formato.
Aunque la pintura fue la técnica mayoritaria de la noche, el público pudo descubrir otras disciplinas como la escultura o la cerámica. Así, para despertar el interés creativo en los más pequeños, en diversas plazas del centro se impartieron talleres de dibujo con tiza o de esculpir piezas de marès.
La Nit de l'Art es una iniciativa organizada por el Ayuntamiento de Maó y el Ateneu de Maó, para incentivar el conocimiento del arte que se cuece en la Isla y dar a conocer el proceso creativo de los artistas residentes.
Se trata de una cita que ayer demostró su poder de convocatoria, en una ambiente de libertad creativa y de sintonía artística, que se está convirtiendo en un evento de referencia en la dinamización cultural de la Isla.
3 comentarios
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Muy acertada la idea de mezclar pintores consagrados con casi noveles.
Enhorabuena por la iniciativa. En mi opinión, no hace falta que salgan todos a la vez, se diluye la admiración y contemplación. Sería mejor darle continuidad ofreciendo un espacio fijo, y que vayan rotando para que ni unos ni otros se "cansen" de acudir. Menorca se merece un Montmartre parisino en clave mediterranea.
Gran iniciativa del anterior equipo encabezado por la Alcaldesa Agueda Reynés.