El espacio de Menorca ocupa el lugar central del estand balear en Fitur 2017.

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Menorca reclama un gesto del Gobierno que facilite su apuesta por potenciar la llegada de turistas más allá de la clásica temporada estival. Por un lado, la Asociación Hotelera de Menorca (Ashome) ya ha pedido una reunión con la Secretaría de Estado de Turismo en busca de incentivos fiscales que faciliten la apertura de establecimientos hoteleros en invierno. Por otro, la presidenta del Consell, Maite Salord, reiteró ayer la necesidad de que mejoren las condiciones del transporte aéreo, con una cogestión aeroportuaria que propicie medidas para atraer a las compañías aéreas, a las que el Govern exige que, ante la bajada de las tasas del dos por ciento anunciada por el Gobierno, la tengan en cuenta a la hora de fijar el precio de los vuelos con las Islas.

La estrategia conjunta del Consell y del sector turístico, tanto el hotelero como el de la oferta complementaria, es mostrarle al mercado turístico que Menorca tiene mucho que ofrecer más allá del verano. Lo volvió a dejar claro ayer, tras la primera jornada de la Feria Internacional de Turismo de Madrid (Fitur), la presidenta del Consell, Maite Salord: «Ni tan siquiera se ha hablado de sol y playa».

No en vano, tanto la administración menorquina como el sector hotelero coinciden en afirmar que en verano «las plazas son las que son» y que por la vía de la oferta reglada es difícil que Menorca pueda crecer más en julio y agosto, meses en que «ya hay una presión humana muy importante», explicó Salord. En ese sentido la inquietud de los hoteleros es que se produzca un aumento de turistas que se alojan fuera de hoteles y que recurren al alquiler y que ello contribuya a un aumento de la sensación de saturación del destino.

La también presidenta de la Fundació Foment del Turisme defendió que «ya hemos visto un punto de inflexión en 2016», año en que se ha superado la barrera de los 500.000 turistas fuera de los meses centrales del verano. Otro de los objetivos de la administración se centra en el tipo de turistas que visitan Menorca: «Tenemos que captar a un turistas de más poder adquisitivo, ya no tiene que ser un tema de cantidad, sino de calidad».

Gastronomía, deportes, naturaleza y patrimonio cultural son los pilares de la estrategia promocional menorquina para lograr unos objetivos que, «tenemos que ser conscientes de que es difícil que den resultados inmediatos». Una de las cosas más complicadas (al menos en los últimos años) ya se ha conseguido. Lograr una voz única de los empresarios y la administración. Ambos han desembarcado en Fitur con las ideas muy claras: «Decirle al mercado que Menorca sí que tiene oferta en invierno», explicaba ayer la gerente de Ashome, Azucena Jiménez.

Es la idea conjunta que trasladan a los agentes turísticos con lo que se están reuniendo y que están recibiendo el mensaje con cierta «sorpresa», explicaban desde el sector hotelero. El objetivo es romper con el círculo vicioso por el que la falta de oferta explica la falta de conexiones aéreas y viceversa.