Entrada en el puerto de Maó del crucero turístico «Saga Sapphire» en una imagen de abril de 2014. | Javier Coll Pons

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La temporada de cruceros comenzará el próximo día 25 en el puerto de Maó y los consignatarios aún siguen a la espera del resultado de la ampliación del estudio de maniobrabilidad que permitiría la entrada de tres buques que ahora no pueden operar: el «Seven Seas Explorer», el «Artania» y el Oriana». Autoridad Portuaria de Balears (APB) anunció que estaría listo a finales de 2016, después amplió el plazo a enero de 2017 y ahora, a poco más de dos semanas para que el primer gran crucero de este año atraque en la rada, la gerente de la empresa Federico J. Cardona, Rosa Cardona, asegura que empiezan a «estar ansiosos» por tener dicho informe, ya que las maniobras en simulador se realizaron el pasado otoño.

El estudio debe fijar los criterios para la entrada en el puerto de este tipo de buques que superan los 220 metros y no llegan a los 300, por lo que frente a los supercruceros, que superan los 320 y 360 metros, se consideran de eslora media. Pertenecen a una generación de buques de lujo que no dispone de la moderna tecnología para maniobrar que tienen otros gigantes del mar de más reciente botadura.

Los tres barcos «Seven Seas Explorer», «Oriana», y «Artania» ahora mismo, con las condiciones de seguridad establecidas por Autoridad Portuaria no puede atracar en Maó.