Clientes del hotel Farragut de Ciutadella disfrutan de las instalaciones de la piscina. | Gemma Andreu

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No ha empezado bien la temporada alta para el sector hotelero menorquín. Los datos oficiales sobre la ocupación en mayo confirman una asistencia media del 62,5 %, lo que supone un retroceso de cuatro puntos respecto al ejercicio pasado, cuando fue del 66,7 %. A pesar de los buenos augurios que hablan de un verano de récord y de las Balears como un destino en auge para los agentes turísticos, las primeras cifras del arranque no son positivas. Todo lo contrario. «Algo está fallando, eso está claro», reconoció Azucena Jiménez, gerente de la Asociación Hotelera de Menorca (Ashome).

Consultada sobre las posibles causas, la portavoz de la patronal no dudó a la hora de citar dos factores: la falta de promoción específica y el coste de los enlaces aéreos.

Así, desde el sector hotelero solicitan a las administraciones una mayor promoción para el primer mes de la temporada alta. «Hemos vuelto a fallar, o no se ha vehiculado un apoyo suficiente o el trabajo realizado no ha tenido los resultados que esperábamos. Quizás, no se han hecho los deberes del todo y no nos hemos dado a conocer como deberíamos», puntualizó Jiménez.

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