La alcaldesa, Joana Gomila, a la derecha, reunida con Antoni Garcías (Abaqua) y el conseller Vicenç Vidal | GIB

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Hay acuerdo. Tras meses de tira y afloja, este jueves Ayuntamiento de Ciutadella y Conselleria de Medio Ambiente han llegado a un acuerdo sobre el precio que deberá pagar el Consistorio por el agua desalada procedente de la desaladora. La cantidad será de un euro el metro cúbico, a cambio de que el Ayuntamiento consuma 950.000 metros cúbicos anuales, lo que supone que el Consistorio deberá pagara cada año cerca de un millón de euros al Govern por el agua desalada.

Así se ha pactado en la reunión de este jueves que han mantenido la alcaldesa de Ciutadella, Joana Gomila, con el conseller de Medio Ambiente, Vicenç Vidal, la directora general de Recursos Hídricos, Joana Maria Garau y el gerente de la Agencia Balear del Agua (Abaqua), Antoni Garcías, después de que el Consistorio ofreciera al Govern la posibilidad de consumir 200.000 metros cúbicos más, para poder así rebajar el precio inicial de 1,24 euros el metro.

Se ha acordado que ambas administraciones firmarán un convenio para dos años, prorrogable a un tercero con estas condiciones. La intención tanto del Ayuntamiento como del Govern es que la desaladora, cuyas obras acabaron hace siete años, entre en marcha cuanto antes. Abaqua calcula que a partir del mes de abril ya se podría suministrar agua desalada a Ciutadella, aunque no cree que será hasta junio (una vez ya estén listas las obras de conexión con el depósito de Son Blanc) cuando tendrá un rendimiento mayor.

En el próximo consejo de administración de Abaqua se iniciarán ya los trámites para la licitación de la gestión a una empresa privada de la desaladora para los dos próximos dos años, cuya adjudicación podría estar resuelta en el mes de abril. Una vez esté en marcha la desaladora, con este acuerdo, se podrá suministrar agua desalada a las urbanizaciones de Cala en Bosc, Son Carrió, parte de Cala Blanca, Son Blanc, Oleo y la parte del casco urbano que queda entre la República Argentina, el Paseo Marítimo y el Passeig de Sant Nicolau.

Otro acuerdo de la reunión de este jueves es que el Govern se compromete a ejecutar la conexión de la desaladora con el depósito de Es Caragolí, para que en un futuro se pueda abastecer todo el casco urbano. En todo caso, se trata de un proyecto más a medio plazo, ya que su coste (unos 4 millones de euros) es mayor que el de las conexión con Son Blanc (500.000 euros). La intención de Abaqua es es sacar en breve la redacción del proyecto, y que su ejecución pueda ser sufragada a partir de 2019 con los fondos del impuesto turístico.