El ministro Montoro durante la presentación de los presupuestos para 2018

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Para la izquierda son una muestra de la falta de interés inversor del Gobierno de Rajoy por Menorca. Para el PP, en cambio, tienen un marcado carácter social y responden a las reivindicaciones de la gente. Son a grandes trazos las dos visiones antagónicas que mostraron este miércoles PSOE, Més per Menorca y Podemos y el PP respecto a los Presupuestos Generales del Estado.

La diputada nacional del PP Águeda Reynés destacó que la inversión (que cae a 4,8 millones de euros) «es importante, pero no lo más importante». Los populares defienden que lo que define los presupuestos es su componente social y en ese sentido destacan el aumento de las pensiones y las mejoras a favor de las familias.

Reynés también quiso poner en valor la actualización de la financiación de las administraciones autonómicas y «la garantía de que los ayuntamientos podrán utilizar el superávit para facilitar el acceso a los servicios públicos fundamentales». En el ámbito del transporte se mostró «convencida» de que acabarán incluyéndose por la vía de la enmienda, algo que desde las filas populares se da «casi por hecho».

La diputada popular achacó la falta de más inversiones a la inacción de las administraciones locales al no presentar proyectos y puso como ejemplo de lo contrario la gestión con Es Castell para lograr 1,1 millones para la pasarela portuaria del municipio.

La secretaria general del PSOE Menorca, Susana Mora, aseguró que las cuentas muestran como Menorca y el resto de Balears «sigue estando a la cola de la inversión estatal. Son una de las últimas preocupaciones del Gobierno de Rajoy». En ese sentido, los socialistas lamentaron que el PP «ha priorizado aumentar un 1,5 por ciento el salario de los miembros del Gobierno» en vez de ordenar mejoras en ámbitos como el sistema público de pensiones, la educación, el descuento del 75 por ciento o el convenio de carreteras: «Es una vergüenza que desde el PP de Menorca pidan nuestro voto para estos presupuestos», concluyó.

Para Més per Menorca el Gobierno «se ha olvidado de Menorca», con una inversión que vuelve a estar «bajo mínimos» y que no contempla ni las cantidades comprometidas del convenio de carreteras, ni las inversiones estatutarias. El coordinador general de la formación, Nel Martí, lamentó que no aparezca reflejada en las cuentas «ninguna mejora para la conectividad», ni para la OSP a Madrid, ni para el aumento del descuento al 75 por ciento: «Si se acaba consiguiendo no será gracias al PP».

«Balearofobia»

Por su parte, Cristina Gómez, vicepresidenta segunda del Consell y miembro del Consejo Ciudadano de Podemos, destacó que los presupuestos muestran «la balearofobia de M. Rajoy», con una inversión por habitante en el Archipiélago 69 euros inferior al resto y unas cuentas que muestran de nuevo el «austericismo» del Gobierno: «A este ritmo tardaremos 40 años en recuperar el nivel de techo de gasto previo a la crisis».

Gómez se centró especialmente en el ámbito social: «Un incremento del tres por ciento a las pensiones más bajas no soluciona el problema», alertó, haciendo notar que una pensión no contributiva de 375 euros pasará a ser de 386 euros. En relación a Menorca destacó que la única nueva inversión es la de los juzgados y que tiene que ver con el trabajo realizado por el Ayuntamiento de Ciutadella.