La parcela. Es la opción definitiva por la que se decanta el Ayuntamiento de Alaior, de ahí que ya ofrezca su cesión y solicite al Govern su declaración de interés autonómico para construir el centro de salud | Javier Coll

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El informe jurídico municipal avala la idoneidad de la parcela de Cala en Busquets para levantar en ella el futuro centro de salud de Alaior. El documento concluye que una parte de esta parcela tiene abierto un litigio ante la Sala Contencioso Administrativo, no obstante, concreta que este hecho «no afecta a la titularidad de la parcela ni a posibles cambios de uso» puesto que «lo que se está ejecutando es la sentencia relativa al precio justo de expropiación llevada a cabo por un procedimiento de tasación conjunta con el propietario».

El Ayuntamiento de Alaior desmiente por tanto, informes en mano, las advertencias lanzadas por el partido de la oposición Junts per Lô que indicaba que al tratarse de una parcela expropiada para un uso educativo otorgaba el derecho a la reversión al propietario y a replantear indemnizaciones. «La parcela es municipal y el litigio con los anteriores propietarios solo se circunscribe al precio de la expropiación y en nada afecta a sus usos», incide.

El informe técnico municipal afirma que el solar dispone de todos los servicios urbanísticos y resulta «aceptable el cambio de uso escolar a sanitario en base al decreto ley de medidas urgentes para la mejora o ampliación de la red de equipamientos púbicos» del Govern. El técnico municipal también establece que la parcela permite ubicar en este nuevo solar el mismo proyecto redactado para la parcela de la calle Avinguda Verge del Toro. Cumple con los parámetros urbanísticos necesarios.

Es así como el Grupo Popular solicitará en el pleno extraordinario municipal que se celebrará esta tarde que el Consell de Govern declare de interés autonómico la construcción del futuro centro de salud en la parcela de Cala en Busquets y que, acepte, en el mismo acto, la cesión del solar.

Así, el equipo de gobierno descarta ya las otras dos opciones que se habían planteado inicialmente, es decir, la parcela de la Avinguda Verge del Toro y el edificio del antiguo colegio La Salle, al contar con reveses a superar. Una por tener que trasladar la zona verde, otro por tener que comprar el edificio.