La presidenta insular del PP Misericordia Sugrañes, en una foto de archivo | Gemma Andreu

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La presidenta del Partido Popular en Menorca, Misericordia Sugrañes, manifiesta que esta formación política se opone a la iniciativa del Consell de identificar únicamente a los republicanos menorquines que perdieron la vida durante la Guerra Civil y el franquismo, unas 500 personas en distintas fases de trabajo. Considera que es una medida sectaria y olvida a una parte de las víctimas, las que sucumbieron por los actos violentos del Frente Popular.

En un artículo que se reproduce íntegramente este jueves en la sección de Opinión, Sugrañes expone que «nos oponemos frontalmente a que se gaste dinero público para favorecer el revanchismo y sectarismo de ciertos personajes que están en política activa, como es el caso del conseller Miquel Maria». Añade además que esta acción pretende «favorecer a sus escribanos acólitos, indicándoles los criterios a seguir para reescribir la historia, presentando a los del Frente Popular como víctimas y a los del Frente Nacional como verdugos».

La presidenta del PP-Menorca insiste y redunda en la idea de sectarismo, una posición que define como propia de la izquierda en todo lo que se refiere al análisis de la historia del siglo XX en España. Considera que la medida impulsada por Maria debería incluir a «los 148 asesinados y ejecutados directamente por miembros del Frente Popular a los que, para hacer justicia, deberíamos añadir los muertos en combate, en checas de Barcelona y en la Modelo de Madrid, hambre y represión en la retaguardia del frente populista». Cita, por ejemplo, a las víctimas del buque «Atlante», el brutal asesinato de Hercelia Solà o en la fortaleza de La Mola. «Estos muertos y asesinados también necesitan reconocimiento, memoria y dignidad».

Es más, afirma que el Partido Popular «siempre ha estado y estará de acuerdo en que se localicen y se exhumen los restos mortales de las víctimas de la guerra, sean del Frente Popular o del Frente Nacional, para que sus familiares y allegados puedan darles digna sepultura, si así lo desean».