La mitad de la urbanización de Son Oleo está adaptada para la instalación de fibra óptica a través de cables soterrados, aunque la otra mitad sigue sin estarlo. Ello es consecuencia de un proyecto de mejora inacabado desde hace años. | Gemma Andreu

TW
6

Vecinos de la urbanización de Son Oleo, en Ciutadella, se han mostrado molestos por la instalación de fibra óptica de forma aérea que se está llevando a cabo en la zona. «Se está pasando por encima de las propiedades privadas, rompiendo con la estética de la urbanización», explica un residente.

Este sistema supone instalar los cables fijándolos entre postes, creando una maraña de cables en las fachadas que ha generado incomodidad entre la comunidad. Por ello, reclaman a los responsables de la instalación, en este caso Telefónica, que se retire todo el cableado instalado y que se realice el montaje de manera soterrada ya que desean «mantener la estética de Son Oleo».

Lo cierto es que tan solo una parte de la urbanización está adaptada para desplegar la fibra óptica de tal manera. «Solo medio barrio dispone de la infraestructura necesaria para hacer la instalación soterrada, la otra mitad no», afirma el presidente de la Asociación de Veïns de Son Oleo, Esteve Barceló. Aunque es consciente de que se trata de una situación de difícil solución, recuerda que es algo que piden desde hace años. «Llevamos dos o tres legislaturas con ello», explica Barceló. También recuerda que el proyecto de mejora de Son Oleo incluye dicha adaptación de toda la urbanización, aunque desconocen cuando se ejecutará de forma completa.

Desde el Ayuntamiento corroboran que en Son Oleo se realizó tan solo una primera fase del proyecto, sin que la segunda llegará a ejecutarse. De este modo, la diferencia no solo se encuentra en las infraestructuras para la instalación de fibra óptica sino en que también es visible en aceras y alumbrado.

La problemática en torno a los cables de fibra óptica, tal y como apunta el regidor de Urbanismo, José López, no sucede únicamente en Son Oleo. En muchas zonas del municipio «existe una estructura hecha para realizar la instalación soterrada que nunca se ha llegado a aprovechar», explica. Según López, la Ley de Telecomunicaciones permite al servidor, en este caso Telefónica, instalarlo de forma aérea. Un sistema más fácil y, probablemente, más económico para ellos. Aunque es evidente que el cabelado exterior desmejora el entorno visualmente.

La situación, recuerda López, es parecida a la del casco antiguo de Ciutadella, con la diferencia de que en el centro histórico el plan especial de protección prohíbe el cableado exterior. «Con lo cual la instalación de fibra óptica, simplemente, no se realizó», explica. En cambio, en el caso de Son Oleo, como en muchas otras zonas, existe la alternativa aérea, preferente en las empresas como Telefónica.