El puente más largo, de casi cincuenta metros de longitud por dos metros de ancho, se construirá en Cala Molí

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Para unir dos puntos lo más corto siempre es la línea recta. Pero si se trata de ir a pie y entre los dos puntos en cuestión está el mar, la línea recta se complica y hay que dar un rodeo para poder transitar de un punto a otro. Esto ocurre, y con trayectos considerables, entre las dos riberas de Cala Molí (Es Mercadal) y entre las zonas de casas de Sa Mesquida (Maó) que separa el torrente. Para evitar estos importantes rodeos, la Demarcación de Costas de Balears proyecta la construcción de dos puentes peatonales de madera en ambos espacios.

El puente más largo, de casi cincuenta metros de longitud por dos metros de ancho, se construirá en Cala Molí para conectar los accesos al mar desde la ribera sur con las inmediaciones de una rampa de varada situada en la ribera norte, es decir, las zonas más próximas a las urbanizaciones de Addaia y Na Macaret respectivamente. Las dos entradas a este puente contarán con sendas pasarelas sobre tierra de quince y veinte metros de longitud respectivamente, para un total de algo más de ochenta metros de construcción. En la justificación del proyecto se indica que en estos momentos para acceder a pie de un punto a otro, para pasar de una ribera a otra por tierra, es necesario realizar un largo recorrido de tres kilómetros por calles y carretera.

Las dos ‘mesquides’

En cuanto a Sa Mesquida, el puente previsto conectará la zona principal de viviendas con el núcleo de casas, el más próximo a la playa, conocido popularmente como Cala Pato. Entre ellos existe en estos momentos una zona de juegos, con un espacio para la práctica deportiva, y la desembocadura de un torrente. En estos momentos el acceso a Cala Pato conlleva un recorrido de unos 700 metros por carretera, además de un considerable desnivel. La solución planteada por la Demarcación de Costas de Balears consiste en un puente de 25 metros de largo por dos metros de ancho sobre el torrente, al que se llegará por dos pasarelas en tierra de 52 metros (en la parte de Cala Pato) y 40 metros (en la parte más próxima al nucleo residencial). Son 117 metros en total.

El proyecto está en estos momentos en periodo de exposición pública, previo a su licitación. El presupuesto conjunto de la actuación es de 323.198 euros, con un plazo de ejecución de su instalación