Una enfermera atiende a una paciente en una de las consultas del Hospital Mateu Orfila. | 4 Vents

TW
1

Los profesionales de enfermería de Balears comenzarán a prescribir medicamentos y productos sanitarios a partir de abril. Se trata de una reivindicación histórica del colectivo que ayer se vio cumplida con el anuncio de la consellera de Salud, Patricia Gómez, de que la prescripción enfermera se hace realidad tras la aprobación del Real Decreto 1302/2018 de 22 de octubre, que modifica el anterior de 2015. «No es una prescripción completa, pero es un gran paso», declaró Bárbara Duque, directora de Enfermería del Área de Salud de Menorca, al término del encuentro mantenido en la Conselleria de Salud en Palma. Duque recordó que durante años las enfermeras y enfermeros han reclamado prescribir «porque tenemos las capacidades y la formación universitaria para ello» pero desde que en 2011 el primer intento de regulación autonómica fue recurrido, han pasado ocho años de espera.

Son un total de 130 profesionales en Menorca, 60 en Atención Primaria y 70 en el Hospital Mateu Orfila, los que tendrán acceso a la prescripción enfermera. En una primera fase podrán recetar las enfermeras de Primaria y de consultas y gabinetes hospitalarios, y en una segunda, en junio, el resto de trabajadores de enfermería en áreas de hospitalización y críticos, como son las Urgencias y UCI. Podrán recetar productos sanitarios de uso humano como apósitos, absorbentes, material de curas, bolsas de ostomía y sondas urinarias y de alimentación entre otros. También prescribirán medicamentos no sujetos a receta médica y medicamentos que sí lo están, con la validación previa de protocolos por parte del Ministerio de Sanidad.

Duque destacó que con esta regulación se ganará en «agilidad» que repercutirá en una mejora para el usuario, «hay muchos productos que solo tocamos las enfermeras», aseguró, «ahora podremos decidir con seguridad jurídica».

El acceso a la prescripción se realizará mediante un proceso de acreditación de los profesionales; éstos ya pueden solicitar el certificado digital para acceder a la aplicación de la receta electrónica. Para ello deben estar colegiadas y tener un año mínimo de experiencia laboral; si no la tienen, se les ofrecerá formación, que en un futuro se trabaja para que sea impartida directamente en la Facultad de Enfermería y Fisioterapia de la UIB.