Los vecinos de Cap d’Artrutx reciben desde este viernes el agua de la desaladora en sus casas | Gemma Andreu

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La desaladora de Ciutadella ya suministra agua potable a los vecinos de Cala en Bosc y Cap d?Artrutx, que desde este viernes ya podían beberla directamente de sus grifos.

Hasta ahora, las viviendas de estas urbanizaciones recibían, durante el verano, agua de los pozos que, aunque no tenía nitratos, era muy salada. Durante el invierno la recibían desde la estación de Es Caragolí. «En pocas horas se debería notar la diferencia ya que estamos hablando de una zona donde el agua era bastante mala», comunicó este viernes la concejal Noemí Camps.

La noticia, que llega ocho años después de la construcción de la planta, cogió por sorpresa a algunos residentes en la zona que enseguida comprobaron el nuevo sabor del agua. «Salada no está», expresó un vecino de Cap d?Artrutx, que tenía a los pies de su grifo varios litros de agua mineral embotellada recién comprada. «Ahora nos plantearemos si dejar de comprarla», comentó.

El agua desalada, en cambio, sigue sin llegar a las urbanizaciones Son Carrió, Cala Blanca, Son Oleo y Sa Caleta, ya que todavía faltan algunas comprobaciones en la conexión del depósito de Son Blanc, que provee a los núcleos citados, además de a una parte del núcleo urbano (entre el Passeig Marítim y la calle República Argentina). «Estamos pendientes de las últimas pruebas pero, en breve también tendrán agua desalada», señala Camps.

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