La Dirección General de Energía pone el foco en los posibles efectos medioambientales del incidente ocurrido el martes en la central

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La Dirección General de Energía y Cambio Climático del Govern aseguró este miércoles, un día después que el fallo en la central térmica de Maó reviviera los fantasmas del gran apagón de finales de octubre del año pasado, que el equipo de técnicos de la administración balear está evaluando la relevancia de lo sucedido para determinar si procede abrir expediente a la responsable de la principal infraestructura de generación eléctrica de la Isla, Endesa.

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En concreto los técnicos investigarán si la aceleración repentina de uno de los tres motores diésel (se alimentan de fueloil) para compensar la caída de una de las cinco turbinas de gas de la central pudo provocar un exceso de emisiones contaminantes y si ese exceso supera los límites legalmente establecidos o bien está dentro de los parámetros que se tienen en cuenta a la hora de fijar el límite anual de emisiones.

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