Vista general de la ciudad de Maó que es el municipio que más deberá devolver a Hacienda con la liquidación de 2017 | Javier Coll

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Sorprendidos. Así se han quedado los ocho ayuntamientos y el Consell tras conocer que el Ministerio de Hacienda transfirió más dinero del que debía en concepto de participación en los impuestos estatales y ahora hay que reintegrar las cantidades percibidas de más. Tienen que devolver al fisco 1,2 millones de euros por ese exceso de optimismo del Gobierno estatal al calcular la recaudación. En concreto, los ayuntamientos deben transferir algo más de un millón y el Consell otros 224.201 euros. Maó es el municipio con el mayor desajuste al superarse los 300.000 euros que se ingresaron de más.

Hacienda hace una previsión del importe que generarán los impuestos de recaudación estatal (IRPF, IVA, labores del tabaco, cerveza, alcohol e hidrocarburos) y hace un cálculo de la participación según la población, el esfuerzo fiscal y la capacidad tributaria de sus ciudadanos, entre otras variables. Va haciendo anticipos periódicos para que las administraciones tengan suficiente liquidez para afrontar el coste de los servicios públicos.

Dos años después, el Ministerio liquida y en base a la recaudación definitiva saca cuentas. Ahora ha cerrado el año 2017.

Los ayuntamientos consultados consideran que este desajuste es poco habitual, ya que en la mayoría de los casos, pese a existir siempre un desvío, suelen ser cifras ajustadas y próximas a lo real, apunta el concejal de Hacienda de Alaior, Cristóbal Marqués. Y no recuerda cifras tan elevadas a tener que devolver.

Con la liquidación del 2016, que se hizo en 2018, también salió a pagar a siete de los ocho ayuntamientos (excepto Alaior en el que Hacienda se quedó corto), pero las cuantías era inferiores a las que reclama ahora el fisco. Y con respecto a las cuentas de 2015 y 2014 a todos (excepto Sant Lluís que en 2015 tuvo que devolver 6.165 euros) les salió a ingresar por parte de Hacienda.

El teniente de Alcaldía de Política Económica y Fiscal de Sant Lluís, Joan Pons, explica que en su caso el Ministerio hace los pagos a cuenta trimestralmente. No recuerda un desajuste tan importe que, en su caso, «roza el 10 por ciento con respecto a lo inicialmente estimado». Indica que la devolución se realizará con los anticipos de este 2020, es decir, que en base a la previsión, se les descontarán -de forma fraccionada- esos 117.000 euros cobrados de más. Desconoce qué puede haber hecho inclinar tanto la balanza. «O hicieron una previsión muy optimista o han cambiado algún baremo, no lo sabemos», apunta.

Para el alcalde de Es Mercadal, Francesc Ametller, «nos hacen un traje» porque es dinero que ahora hay que descontar del presupuesto y, ello supone tener menos para invertir. Además, Ametller incide en que el Gobierno ya les ‘quitó’ 300.000 euros al bajar de los 5.000 habitantes. «Y ahora hay que descontar otros 182.500 euros de lo ya cobrado en 2017», concluye. Ametller avanza que ahora la población vuelve a superar los 5.000 euros, de ahí que recuperará esos 300.000 euros que perdió.