Esta ayuda se dirige a facilitar la autonomía de personas para seguir residiendo en su hogar

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La Conselleria de Bienestar Social ha dejado pendientes de resolver 68 solicitudes para ayudas económicas a personas mayores o con una discapacidad. Y la explicación no es otra que al Consell le ha pillado el tren. No le ha dado tiempo a resolver todas las peticiones recibidas en la convocatoria de 2019.

La línea de ayudas se publicó tarde -en septiembre- debido a la celebración de elecciones que, según el Consell, ha retrasado todo tipo de trámites. Además, el Ejecutivo insular dio a los interesados hasta noviembre para presentar la solicitud. Y se disparó el interés por percibir una ayuda económica.

No obstante, y con el fin de no dejar perder los 200.000 euros con los que estaba dotada la línea de ayudas, el departamento decidió resolver parcialmente la convocatoria y poder otorgar las primeras cantidades. Las restantes se concederán en 2020, cuando el departamento acabe de analizar la documentación.

El Consell recibió en total 175 solicitudes. Y en esta primera tanda se han resuelto 107. De ellas, han salido favorables 72 peticiones para personas mayores, otras 29 se refieren a personas con discapacidad. El montante total alcanza los 79.067 euros. Otras cuatro han sido denegadas y las dos restantes han desistido de la ayuda.

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