El tendido aéreo de los hilos de telefonía ya ha desaparecido y los postes serán retirados próximamente | Josep Bagur Gomila

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Los postes de telefonía que discurren en línea junto a la carretera general en el tramo Ferreries-Ciutadella se van quedando sin hilos y pronto desaparecerán del paisaje. La reciente reforma de la carretera general en este tramo incluye canalizaciones soterradas por las que ya discurre el tendido. La nueva instalación está en funcionamiento desde hace varias semanas.

El Consell y la compañía telefónica firmaron un convenio en julio de 2017 con esta finalidad y el acuerdo estará vigente hasta que Telefónica culmine los trabajos pertinentes. La crisis sanitaria y la consiguiente declaración del estado de alarma más las consecuencias laborales que ha conllevado han retrasado el desmantelamiento del tendido aéreo, tarea que se estaba realizando las semanas previas.

Solo quedarán en pie algunos postes a través de los cuales salen líneas para zonas rurales. Una vez retirado el tendido de hilos, llegará el turno de los postes que durante muchas décadas han permitido la conexión telefónica. El compromiso del citado convenio es que desaparezcan estos elementos y liberar el paisaje del que ya formaban parte.

En los tramos pendientes de reforma de la carretera general se incluye la misma operación de limpieza paisajística con el soterramiento del cableado telefónico. El eléctrico es otro cantar.

La retirada de los cableados aéreos ha sido una reivindicación constante de entidades y de la sociedad en general por constituir un elemento que afea el entorno tanto urbano como rural. El plan de diagnosis de zonas turísticas elaborado por el Consell y presentado dos meses atrás apunta entre las más de 400 mejoras pendientes la mala imgen del cableado de telecomunicaciones.

Ciutadella

Si el cableado aéreo causa mala imagen, en Ciutadella se agrava con el cableado que discurre por las fachadas de eficios en el caso antiguo. Los acuerdos municipales unánimes y las iniciativas dirigidas a «limpiar el conjunto histórico-artístico» de hilos han sido una constante en las últimas décadas, lo que no mpide que el problema se haya mantenido intacto. Ni Endesa ni Telefónica han soterrado sus tendidos, que además han incrementado su volumen.

Las citadas compañías han desoído reiteradamente las peticiones municipales, que se fundamentan en lo dispuesto en el Plan Especial del Casco Antiguo de 1999. El incumplimiento ha causado «un grave impacto y deterioro» sobre las fachadas de numerosos edificios, según denuciaba cuatro años atrás el concejal Joan Carrasco.

El Plan sí ha servido, sin embargo, para frenar el despliegue de la fibra óptica por parte de Telefónica en el área incluida en el conjunto histótico-artístico.