Cada día han participado dieciséis voluntarios; el jueves pasaron por el Racó des Llenyam | Per la Mar Viva

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Voluntarios de la asociación Per la Mar Viva han retirado 692 kilos de desechos del litoral norte de los municipios de Ciutadella y Ferreries. Ha sido entre los cinco días que ha durado la tercera campaña de voluntariado, en la que este año ha participado socios y colaboradores de la entidad.

Dieciséis voluntarios han participado en cada una de estas jornadas de limpieza, que cuentan con el apoyo de Menorca Preservation Fund y los Ayuntamientos de Ciutadella y Ferreries. De hecho, el jueves aceptaron la invitación la alcaldesa de ponent Joana Gomila y los ediles Maria Jesús Bagur y Andreu Cardona, y fueron partícipes de los 279 kilos que se retiraron entre el Racó de s’Aram y el Codolar d’Alforinet.

El martes, entre Punta Nati y el Codolar de sa Torre se sacaron del mar y del litoral 90,58 kilos; el miércoles fueron 118 kilos en apenas dos horas con el salabre (el tiempo impidió la jornada normal) en Cales Morts; y el viernes y el sábado, ya en aguas ferrerienques entre Es Rinconot y Cala Moragues, retiraron 123 y 81,5 kilos. En total, esta semana han retirado 692 kilos. Dato superior a los 425,5 kilos recogidos en 2019, aunque menor a los 915 kilos de 2018.

Boyas, tubos y barcas

Entre los desechos han destacado tres grandes elementos: una gran boya de más de 80 kilos han encontrado en el Codolar d’Alforí, un fragmento de casco de embarcación de unos 70 kilos en Es Rinconot, y un tubo 5,30 metros de largo y 38 kilos que flotaba en Cales Morts.

Desde la entidad, Carlos Salord agradece la colaboración de Carlos de Salort Sintes y de los voluntarios. «Se entregan mucho pero les es gratificante, porque saben que hacen un bien por la fauna marina que muere por la gran cantidad de plásticos en el mar». Y de paso, se mejora el aspecto y la salubridad del litoral. Además, la asociación trabaja para reutilizar estos plásticos. Una parte se destina a la empresa Pwani Menorca que los utiliza para fabricar sus suelas de abarcas. Los aparejos de pesca (boyas, flotadores) reaprovechables se entregan a pescadores, y otra cantidad de plásticos se fundirá y se reconvertirá en otros «objetos».