Jordi López, senador del PP por Menorca desde hace un año. | G.A.

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«Sin presión ni unidad política ante Madrid no conseguiremos nada», declara el senador menorquín Jordi López. En una comparecencia para analizar la escasa asignación para Menorca prevista en los Presupuestos Generales del Estado de 2021, comentó el ejemplo observado entre los representantes de otras comunidades, que defienden los intereses de las mismas con una sola voz por encima de las diferencias ideológicas. «Cuando se juegan inversión o proyectos importantes aparcan esas diferencias».

La experiencia vivida en una iniciativa que presentó en defensa de los autónomos de temporada que no pudieron trabajar o completar el periodo fiscalmente exigido avalan ese mensaje. «No salió adelante porque los socialistas votaron en contra. No lo entiendo, pretendía atender una demanda justificada de un amplio colectivo», explica.

En cuanto al proyecto de presupuestos lamenta que la mayor parte de la subida de impuestos recaerá sobre las clases medias y bajas. «Se presentan para que paguen más los ricos, pero el mayor impacto lo sufrirán los de siempre, basta citar el ejemplo del diésel», apunta.

Entiende el senador que en un contexto de economía parada, «no es responsable aplicar subidas fiscales» ni tampoco le parece correcto incorporar los 140.000 millones de euros de la Unión Europea «que no llegarán, como pronto, hasta finales de 2021».

Carretera, un millón

Respecto a los 15 millones previstos para Menorca, el 99,3 por ciento de ese importe, corresponde a obras planificadas por Enaire y Puertos del Estado, lo que significa que se concentran en dos infraestructuras. Respecto al millón previsto para carreteras, señala que es el coste que tendrá más o menos la demolición del puente de Rafal Rubí.

No todo es crítica, no obstante, al documento presupuestario. Valora que se destinen 1,5 millones para el mantenimiento de la OSP con Madrid y que se mantenga el descuento en los billetes de los residentes porque «son partidas que llegan a todas las clases», argumenta.

La inversión pendiente para la nueva comisaría de policía de Maó, que acumula más de una década de retraso, y el incumplimiento de las expectativas para los nuevos juzgados de Ciutadella son motivo de frustración. En el primer caso hay una partida de 97.000 euros, «que apenas dará para preparar el terreno» y en el segundo, «a pesar de tener los juzgados en pésimas condiciones y con problemas de accesibilidad no se ha previsto asignación alguna», reprocha el senador.

La peor crítica se la lleva el REB, «que ni está ni se le espera, lo que significa una discriminación de Balears ante regiones como Canarias, Ceuta y Melilla». La comparación da peor resultado en la inversión per capita, «estamos los terceros por la cola, 84 euros por debajo de la media y perdiendo posiciones», acusa.