El límite de personas en las reuniones de ámbito social y familiar afecta a la organización de bares y restaurantes, que también se ven obligados a reducir a seis el número de comensales en una mesa en el interior

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La Conselleria de Salud clarificó este martes cómo afecta al sector de la restauración el recorte en el número de personas que se permite en encuentros sociales y familiares en Menorca, que pasa a un máximo de seis en espacios cerrados y a diez en el exterior. Aunque no se modifica la normativa que regula el aforo de este tipo de establecimientos, la revisión del límite de personas en las reuniones de ámbito social y familiar afecta a la organización de bares y restaurantes, que también se ven obligados a reducir a seis el número de comensales en una mesa en el interior.

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El anuncio del endurecimiento de esta medida en Menorca había generado ciertas dudas en algunos empresarios del sector. Así lo manifestó el presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes de PIME-Menorca, Antoni Sansaloni, quien consideró que la medida afecta a reuniones en espacios familiares «encuentros en casa o en una cochería», pero no en los restaurantes que, en su opinión, son «castigados» durante esta pandemia de manera injusta. «La mayoría respetamos las medidas, y es más fácil controlar a gente sentada en un restaurante que a veinte que hacen una fiesta en un porche», manifestó. Como su homólogo el presidente de los restauradores de CAEB, José Bosch, cree que las nuevas restricciones son un inesperado paso atrás, que afecta sobre todo a los establecimientos que organizan comidas de empresa, previas a las fiestas navideñas. «Esperemos que la situación evolucione para bien», señaló Bosch, «porque el clima ya no favorece las terrazas, el cliente pide estar dentro». En cuanto a la Navidad, el restaurador de CAEB cree que muchos de los empresarios «dan por perdido» el negocio de las comidas de empresa y de familia así como las fiestas de Fin de Año. Sansaloni y Bosch opinan que los restaurantes se volcarán más en las comidas para llevar.

Por otro lado, la limitación de 6 y 10 personas no se aplica a las personas que conviven habitualmente (una familia de 7 miembros, por ejemplo), pero eso no significa que un núcleo o unidad familiar contabilice como una sola persona a la hora de celebrar reuniones.