El alcalde Héctor Pons presentó los presupuestos acompañado por María José Camps y Conxa Juanola | P.A.M.

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El Ayuntamiento de Maó gestionará el año que viene el presupuesto más elevado de su historia a pesar de la caída de los ingresos corrientes. El equipo de gobierno gestionará 42,8 millones, lo que representa un incremento de la previsión del gasto del 10,5 por ciento con respecto a lo presupuestado para este ejercicio. Se trata de «unos presupuestos expansivos» sin incrementar impuestos a los ciudadanos y que «tiene claras las prioridades: más inversión, más estímulo de la economía, garantizar los servicios pese a la bajada de ingresos, dar respuesta a la demanda social y seguir con la hoja de ruta para el municipio a medio y largo plazo», tal como resumió el alcalde Héctor Pons este viernes.

Y es que, el Ayuntamiento estima dejar de ingresar en concepto de tasas en torno a un millón de euros (un 14 por ciento menos). También prevé recaudar 120.000 euros menos en cuanto al impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras.

Para poder mantener la apuesta inversora municipal y seguir con la hoja de ruta marcada, sin descuidar las necesidades sociales y afrontar las consecuencias de la crisis, las cuentas prevén un préstamo máximo de 6 millones de euros. Aunque su intención es no agotarlo íntegramente. El Ayuntamiento prevé incorporar, a partir de abril, una partida de al menos 1,5 millones de superávit de 2019, que se sumará al remanente que pueda surgir del año 2020 y que permitirá que no se tenga que ejecutar toda la operación de crédito prevista. Lo que sí permite esta operación de crédito es realizar inversiones desde principios de año.

El Ayuntamiento de Maó también reforzará «el escudo social» al presupuestar para esta área 6,5 millones de euros, lo que representa un aumento del 6,2 por ciento. Reforzará, por un lado, el personal de Servicios Sociales y el geriátrico, también aumentará las ayudas de emergencia un 8,2 por ciento hasta alcanzar los 214.721 euros. Y reforzará las destinadas a las familias en situación de vulnerabilidad reservando 500.000 euros (un 36 por ciento más).

En lo que respecta al plan de choque para reactivar la economía tras el descalabro provocado por la crisis sanitaria, Maó programa, además del paquete de 6,6 millones para inversiones, una nueva línea de ayudas a los establecimientos de la ciudad de 200.000 euros, además de programas de formación y ocupación.

Hay que apuntar, por otra parte, la clara apuesta por el medio ambiente, cuyo presupuesto del área alcanza los 6,5 millones. Destaca el nuevo contrato de recogida de residuos urbanos puerta a puerta (cuyo coste municipal alcanzará los 2,8 millones, a la espera de las ofertas de las empresas). Y el nuevo contrato de limpieza viaria con un coste de 1,1 millones. Ambos representan un incremento aproximado con respecto al convenio actual del 30 por ciento. Y si aumenta la recogida selectiva, disminuirán los residuos que acaben en Milà, por tanto, también bajará la partida destinada a su tratamiento.