Clientes la noche de este viernes en una cafetería del centro de Maó tras la relajación de las restricciones | Gemma Andreu

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Después de meses de restricciones, los bares y restaurantes estrenaron este viernes la relajación de medidas por la pandemia y ya pueden servir cenas en los interiores. Con la comunidad autónoma en el nivel 1 y una vez que ha decaído el toque de queda, los establecimientos pueden trabajar al máximo de su aforo, el 100 por ciento, en las terrazas y al 50 por ciento en el interior.

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En cuanto al número de comensales, serán de un máximo de diez personas por mesa en el exterior, con un aforo máximo en todo el local de 250, y de seis comensales por mesa en el interior, con un máximo de 150 personas. La hora de cierre será a las 00 horas siempre que las normativas municipales lo permitan. Los empresarios de hostelería y restauración comienzan así a ver la luz al final del túnel desde que empezó la crisis sanitaria en marzo de 2020.

No obstante el Govern recomienda a la población que, para mantener los buenos datos epidemiológicos, los encuentros sociales se limiten a un máximo de diez personas en interiores privados y de quince en exteriores.