En las terrazas se pueden sentar en estos momentos 12 personas en la misma mesa

TW
44

El Govern ya trabaja en un paquete de restricciones para frenar el avance de la nueva ola de coronavirus, que este jueves provocó una cifra de contagios de récord con 795 nuevos casos en Balears. A pesar de que desde el Ejecutivo se había señalado en la última semana que la vacunación cambiaba el modo de afrontar la lucha contra el virus, el exponencial aumento de casos ha hecho que los responsables del Govern y el comité de expertos se hayan puesto a trabajar en un documento que supondrá dar un paso atrás en la desescalada.

Esta nueva ola ha cogido por sorpresa a las comunidades autónomas, que no han tenido más remedio que replantear la desescalada ante el avance imparable de la pandemia. En Balears pasará lo mismo, a pesar de las resistencias iniciales. «El Govern actuará, pero antes hay que hacer un análisis profundo de lo que está pasando», aseguran en el Ejecutivo.

Limitaciones a los grupos

Hay resistencias a anunciar en qué consistirán esas nuevas limitaciones, pero es seguro que tendrán que ver con las concentraciones de personas. Una de las opciones podría ser limitar el número de ciudadanos que pueden estar simultáneamente en una mesa para evitar grupos numerosos. No se aclara por ahora si además habrá un adelanto en el horario de cierre de la restauración, que en estos momentos está fijado en las 02.00 horas, pero podría decretarse el cierre de las barras.

Lo que sí parece decidido es que no se solicitará la declaración del toque de queda, a diferencia de lo que han hecho otras comunidades autónomas. En el Govern recuerdan que el Tribunal Supremo ya anuló esta medida aprobada en Balears, a pesar de que había recibido el visto bueno del Tribunal Superior de Justicia de les Illes Balears.

Todo se analiza

Noticias relacionadas

Todas estas propuestas son, precisamente, las que se están poniendo sobre la mesa estos días, con un análisis pormenorizado de la situación. El análisis incluirá un estudio exhaustivo sobre en qué sectores se dan los contagios, si afecta o no a los vacunados y en qué medida les afecta, y cómo se avanza en las labores de rastreo, mucho más dificultosas que en anteriores olas porque ahora hay mucha menos colaboración de los ciudadanos, que se resisten a decir quienes han sido sus contactos estrechos

También se tendrá en cuenta la situación hospitalaria, que es el termómetro en el que se miden las restricciones. La presidenta del Govern balear, Francina Armengol, señalaba la semana pasada que la incidencia no debe ser el paradigma sobre el que tomar decisiones de si se limita o no la actividad económica y aseguró que es la ocupación hospitalaria la que debe marcar las medidas. En el Govern reconocen que ha habido un aumento de la presión hospitalaria como consecuencia del aumento de contagios, pero insisten en que la situación de los hospitales no es crítica ni mucho menos, con un 12 % de ocupación de las UCI. La ocupación en camas hospitalarias es aún más baja y no llega al 4 % del total.

A pesar de que no se esconde la preocupación por el aumento de los casos, el Govern insiste en que hay un factor importante que debe tenerse en cuenta a la hora de aprobar nuevas medidas y que antes no estaba en el tablero: la vacunación. La mitad de la población está ya totalmente vacunada y, pese a que puede haber nuevos contagios, es improbable que estos sean masivos, a diferencia de la ola de enero. «La vacunación lo cambia todo», señaló Francina Armengol la pasada semana en Twitter.

Pese a ello, hay un sector que genera cierta inquietud. Buena parte del colectivo de personas de entre 60 y 69 años está pendiente de la segunda dosis de la vacuna y algunos de ellos son reticentes a recibirla porque les corresponde AstraZeneca.

Los de 60 a 69 años

Es una franja de edad susceptible de acabar ingresados o incluso en la UCI si no reciben la segunda dosis ya que la variante delta, la dominante en Balears, contagia si no se han recibido las dos dosis. Cuándo se anunciarán las nuevas restricciones sobre las que se trabaja es aún una incógnita, pero es cuestión de días.  El Govern quiere seguir los protocolos que ha mantenido durante toda la pandemia y, antes de anunciar las limitaciones, quiere abordarlas con los representantes de la Mesa de Diálogo Social. También se consensuarán con los consells insulares de cada isla, para que sean corresponsables en las decisiones.