Reencuentro de amigos en el primer día de clase. | Gemma Andreu

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El CEIP Mare de Déu de Gràcia de Maó lamenta que el Servicio de Atención a la Diversidad, dependiente de la Conselleria balear de Educación les haya retirado gran parte del refuerzo que suponía la disponibilidad diaria de un ayudante técnico educativo, que además se veía reforzado con otro más durante dos días a la semana.

«Nos han dejado sin este servicio que para nosotros es fundamental puesto que tenemos a 11 alumnos con este tipo de necesidades», explica la directora Lidia Roselló.

En un principio el SAD no había adjudicado para este curso ni un solo ayudante al colegio mahonés, que al tener conocimiento de la distribución elevó de inmediato una queja a este servicio, «y la respuesta ha sido asignarnos uno, pero solo tres días a la semana, puesto que lo compartiremos con el colegio público de Fornells», señala la responsable de este centro educativo. El SADprioriza la distribución de estos ayudantes a niveles inferiores, fue la explicación recibida por el colegio mahonés.

De acuerdo con el director del colegio de Fornells, que solo tiene un alumno susceptible de precisar esta atención, pactaron que pudiera acudir al colegio de Maó también los días que ha de acudir al otro repartiendo así su jornada laboral, «pero tampoco nos lo han permitido al indicar que los ATE no pueden acudir a dos centros el mismo día», explica la directora.

La solución ha sido pedir a los técnicos de la Conselleria «que vengan a nuestro colegio, vean cómo trabajamos y nos asesoren por si hacemos algo mal, pero de momento no hay respuesta», lamenta.

Lidia Roselló señala que no se puede obligar al profesorado a que cubra el horario de comedor, o el de las primeras horas del día, por ejemplo, para atender a estos escolares con necesidades especiales que ahora van a estar peor atendidos por la falta de este personal técnico».