Adrián Pons, que tiene un despacho mixto en Sant Lluís, también viajará a Madrid para protestar. | Gemma Andreu

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El pasado mes de julio nacía en Sevilla el movimiento Loteros en lucha. Las manifestaciones que han venido celebrando desde entonces cada miércoles en la capital andaluza plantaron la semilla de una reivindicación ahora nacional que también tiene eco en Menorca. ¿La petición principal? Poner punto y final a un periodo de 17 años durante el que las comisiones que perciben por sus ventas permanecen congeladas, y que de media, dependiendo del tipo de sorteo, se sitúan en torno a un 5 por ciento.

17 años durante los que «ha subido el IPC, el nivel de vida, la cuota de autónomos...», recuerda    Victoria Sacoto, responsable de Loterías Ciutadella, quien el próximo miércoles se sumará a la convocatoria de huelga en el sector y se desplazará a Madrid para participar en una manifestación. «El sector está tocado y hay que hacer algo», reconoce.

Al igual que Sacoto, Adrián Pons también regenta un punto de venta mixto, en su caso en Sant Lluís. «La situación es inaguantable; llevamos años de reivindicaciones y no hay manera, ya hemos dicho basta», confiesa el empresario, que también cogerá la próxima semana un avión para hacer fuerza en la capital.

La buena noticia en esta ocasión, señala Josep Martí desde Loterías Ferreries, es que hay acuerdo en el sector: los despachos mixtos, como el suyo, y las administraciones de lotería van todos a una. «Trabajamos    para la empresa que, con diferencia, más beneficios da al año al Estado, pero a nosotros nunca nos toca nada», explica el lotero, que también tiene el billete de avión comprado.

Las estimaciones apuntan a que en 17 años el IPC ha subido en torno a un 31 por ciento. «Todos los puntos de venta hemos perdido poder adquisitivo, con la misma caja de hace diez años, los beneficios son menores», explica Martí. El sector calcula que para compensar la comisión debería pasar a un 10 por ciento, pero parece que, como señala el lotero de Ferreries, verían con buenos ojos alcanzar el 7.

Luis Miquel Carreras, de la administración número 2 de Maó, no viajará a Madrid, pero se sumará como muchos otros loteros a la reivindicación cerrando los negocios el miércoles entre las 12 y 14 horas. «Todo lo tememos en contra.En nuestra situación, sino tuviéramos el local en propiedad    tendríamos que cerrar», alerta.

Con cada décimo de Navidad vendido el lotero gana 80 céntimos

La buena noticia es que este 2021 está siendo algo mejor de lo esperado. Y ello es gracias al turismo nacional, que suele disparar en verano las ventas del sorteo de Navidad,    el que menos margen deja, un 4 por ciento, es decir, 80 céntimos por décimo «brutos» puntualiza Josep Martí, quien sostiene que no se puede pasar por alto que el Estado les exige tener un local con unas condiciones especiales, un nivel de seguridad tres y un seguro especial. «Gastos a los que hay que sumar los incrementos de la cuota de autónomos, la luz, alquileres e hipotecas....» Por la venta de un décimo de la Lotería Nacional ordinaria (6 €) se llevan 33 céntimos por un boleto de Euromillón (2,5 €) ganan 14 céntimos. Beneficios todos ellos que tienen una retención del 15 por ciento.