Imagen de archivo de un autobús en la estación de Maó | GRUP SERRA

TW
24

Los autobuses de transporte regular de Menorca disponen de ocho asientes reservados para personas con movilidad reducida, como puede ser el caso de mujeres embarazadas o mayores, en sus filas delanteras. Aun así, el cumplimiento de esta preferencia a menudo queda en manos del civismo de los viajeros ajenos a estos colectivos. No siempre se da. Un pasajero, Tiburcio Sintes, relata en una carta a «Es Diari» que en un reciente desplazamiento entre Es Mercadal y Ciutadella tuvo que realizar todo el trayecto a pie, a pesar de contar con 75 años de edad.

Este usuario lamenta también que el vehículo iba muy lleno, «íbamos apelotonados como ganado». Desde el Departamento de Movilidad del Consell explican que los autobuses tienen un aforo para personas sentadas y otro para personas que van de pie, y que los conductores llevan a cabo un control estricto del cumplimiento de estos máximos.

Viajar sin ir sentado se permite en trayectos inferiores a 35 kilómetros, incluso estos pasajeros tienen por parte de la empresa un seguro distinto de los que van sentados. Movilidad reconoce que a veces el bus va lleno, pero no consta un reciente aumento exagerado de pasajeros.