Los coches más pequeños disparan sus precios de alquiler. | Gemma Andreu

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El precio de los coches de alquiler sin conductor consolida su incremento previsto a medida que avanza la temporada estival recién iniciada.

El encarecimiento de las grandes empresas multinacionales ha disparado el coste, de acuerdo con la elevada demanda turística y la reducción de la flota por la bajada de las marcas en su producción. Tanto es así, que la distancia entre el coste de    un coche de alquiler, por día, se está acortando respecto al del de una habitación doble de hotel, que puede estar entre los 108 y los 178 euros.

Tomando como referencia la tercera semana de julio, del 17 al 24, el precio medio de un coche utilitario, el Fiat Panda, por ejemplo, ronda los 600 euros, aunque en algunos casos se halla incluso muy por encima de esta cifra. «No es que ahora hayan vuelto a subir», explica Joana Capó, presidenta de la Asociación Empresarial Menorquina de Alquiler sin Conductor, sino que quedan pocos vehículos disponibles «y quienes no hayan hecho las reservas con una cierta antelación ahora sí se encuentran con estos precios elevados». Es la ley de la oferta y la demanda, que en Menorca y resto de islas resulta ahora más llamativa «porque hasta el año pasado aquí teníamos los precios muy bajos», indica la empresaria.

Otras empresas adscritas a la asociación ofertaban los utilitarios meses atrás a un precio sensiblemente inferior, sobre los 300 euros semanales, pero ahora ese precio es de imposible aplicación puesto que la mayoría tiene prácticamente toda la flota alquilada en las semanas de referencia, tanto en julio como en agosto.

Las grandes multinacionales sitúan el precio de sus vehículos de gama baja para esa misma semana, del 17 al 24 de julio, con    precios que van desde los 600 hasta los 750 euros, lo que da una idea del coste considerando que hace dos años el precio podía ser hasta tres y cuatro veces inferior.