La empresa solo podía botar siete embarcaciones por la rampa | J.T.

TW
21

Demarcación de Costas ha retirado a Monkey Boat Menorca su licencia para operar en Serpentona. Eso es, por el impago del cánon correspondiente a varias anualidades y, también, por reiterados incumplimientos con relación al número de embarcaciones que bota. En consecuencia, el Ayuntamiento de Ciutadella retiró este viernes de la vía pública la caseta de venta de tickets de la empresa.

La intervención fue a cargo del área municipal de Disciplina Gubernativa, no antes de «haber solicitado, hace días a la empresa, que retirara su caseta». Así lo exponía este viernes la concejal responsable, Maria Jesús Bagur, quien señaló que «Costas les ha retirado la licencia por incumplimientos    reiterados, y aún así seguía operando».

El 30 de julio pasado, Menorca-Es Diari ya avanzaba las intenciones del Consistorio de acabar con los excesos que se estaban produciendo en la urbanización limítrofe entre Ciutadella y Ferreries. Usuarios de los amarres habían denunciado que empresas de alquiler de embarcaciones sin titulación superaban en mucho el número de barcas autorizadas por Costas.

Hasta ahora, el ente estatal tenía concedidas licencias a tres empresas, para que pudieran utilizar la rampa del torrente para botar un total de 18 embarcaciones. De estas, 7 correspondían a Monkey Boat Menorca.

Noticias relacionadas

Ocupación de la vía pública

Maria Jesús Bagur apuntó que «la empresa echaba al mar más embarcaciones de las permitidas». A raíz de eso, «Costas le ha retirado la licencia, y nosotros no podemos autorizar la ocupación de la vía pública para una actividad que ha perdido su licencia», defendía la edil ciutadellenca.

Desde las casas consistoriales remitieron a la empresa varios requerimientos. «Hemos dado tiempo para que retiraran la caseta, y al no haberlo hecho, de forma subsidiaria ha sido el Ayuntamiento quien se la ha llevado».

En cuanto al proceso iniciado por Costas, podría derivar en un expediente sancionador contra Monkey Boat Menorca.

En 2023 expirarán las autorizaciones por cuatro años que tienen concedidas las otras dos empresas que operan en Cala Galdana. A partir de entonces, el Ayuntamiento de Ciutadella tiene previsto solicitar a Costas que le ceda la gestión de estas concesiones, para así establecer límites al «descontrol» existente con una actividad que, denuncian los usuarios, a menudo deriva en incidencias en el mar.