Vista desde Cap d’en Font, despejada en invierno, de una zona de fondeos de la costa de Sant Lluís. | Katerina Pu

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El Ayuntamiento de Sant Lluís entiende que el plan director que reclama Capitanía Marítima para informar favorablemente las solicitudes de fondeos a Costas ha de tener carácter insular. Así lo entienden también otros alcaldes, según lo tratado en la última junta, y el propio responsable del Distrito Marítimo de Menorca.

De la respuesta municipal se deduce que Sant Lluís no trabaja en ese documento como tal, que fue una de las condiciones de Costas el año pasado para no reproducir la negativa a la autorización de fondeos en su litoral. Su intención es solicitar de nuevo la autorización de los amarres y fondeos, aunque estableciendo previamente una regulación y de acuerdo a unos criterios en los que está trabajando.

Cree que de este modo se dará respuesta a las deficiencias, sobre todo en materia de seguridad, apuntadas en el informe de Capitanía Marítima. Se salvaría así otra temporada de forma provisional hasta que los ayuntamientos acuerden redactar un plan director insular con su normativa correspondiente para salvar las exigencias de Costas.

Traspaso de Costas al Govern

Sant Lluís y el resto de alcaldes echan mano del factor traspaso de competencias para no precipitar soluciones individuales. El acuerdo entre el Gobierno central y el autonómico para llevar a cabo la transferencia de la Demarcación de Costas en julio del próximo año es esperado por los ayuntamientos menorquines para lograr una mayor flexibilidad en la gestión de los amarres y fondeos.

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Sin embargo, otras fuentes relativizan ese optimismo al aducir que cambia la titularidad de la competencia pero la legislación es la misma. Y los funcionarios que velan por su cumplimiento también serán los mismos, aunque dependientes de otra administración y, por tanto, sí pueden adoptarse otros criterios que regulen una actividad que amenaza con el bloqueo como temen algunas asociaciones de fondeo y amarristas.

La alerta de Cap d’en Font

Entre estas asociaciones, la de Cap d’en Font ya ha alertado a sus asociados. Esta entidad solicitó directamente a Costas los incumplimientos en los que se basa la denegación, pero no ha recibido respuesta, ya que el interlocutor y beneficiario de la autorización es el Ayuntamiento.

La Associació de Fondeig de Cap de Font señala que los plazos para peticiones de fondeo para el próximo verano concluyen ahora en diciembre y presiona al Ayuntamiento, al que ofrece colaboción en la redacción del plan director municipal. En la carta a los socios muestra una clara inquietud ante la hipótesis de que se repita la negativa y se ponga en peligro la actividad náutica.

En segundo lugar, ha solicitado ya el permiso ordinario, como en ocasiones anteriores, al Ayuntamiento, con la petición agregada de que la autorización sea para cuatro años e incluya una ampliación en el número de amarres para dar salida a la lista de espera y algún fondeo para embarcaciones en tránsito.

En vista de los antecedentes y ante la hipótesis de nuevas complicaciones, esta asociación ha encargado a un ingeniero un proyecto básico de fondeos para realizar una solicitud de autorización con proyecto de fondeo directamente a Costas antes de fin de año, compatible con la autorización presentada al Ayuntamiento. Hay muestras evidentes de preocupación.

El apunte

Es Murtar, contra la retirada de siete barcas clásicas que impone Costas

Son siete barcas tradicionales de entre cinco y seis metros de eslora que siempre habían reposado en algar frente a las casetas de Es Murtar hasta que Costas, a través del Ayuntamiento de Maó, titular de la concesión administrativa, ha denegado la autorización. Son propiedad de personas mayores que las utilizan como ocio pesquero en verano y la asociación de vecinos de Es Murtar, en su defensa, apela a la tradición de uso de esta zona como varada. El Ayuntamientoprepara un recurso contra la denegación de Costas.