Imagen de las obras del Hotel Port Mahon.

TW
0

La inversión hotelera en reformas durante este invierno 2022-2023 supera los 190 millones euros en el conjunto de Balears, lo que supone un 34 % más respecto al ejercicio anterior. Todos los proyectos visados por el Colegio de Arquitectos de Balears, de enero a octubre, están sujetos a las nuevas directrices que marca la ley turística que aprobó el Govern en febrero del pasado año.

Menorca es la isla que registra un mayor porcentaje de incremento, en concreto del 128 % hasta alcanzar los 18,3 millones de euros.En el caso de Mallorca el aumento es del 80 % con una inversión de 127,4 millones mientras que Eivissa y Formentera registran un descenso del 30 % y se sitúan en 44,5 millones de euros.

La directora general de la Asociación de Constructores de Balears, Sandra Verger, ve todavía recorrido en este tipo de inversiones turísticas a lo largo de 2023. Verger puntualiza que el Colegio de Arquitectos de Balears «ha visado obra suficiente para mantener la actividad durante todo este año».

Impulso de los fondos europeos

Añade que las subvenciones que se van a recibir con los fondos comunitarios Next Generation son muy variadas «y tienen al sector de la construcción como elemento tractor para hacer estas obras de rehabilitación y reforma que vienen subvencionadas por fondos europeos». Hasta la entrada en vigor de la nueva ley, la evolución de las obras de reformas de modernización o integrales de los establecimientos turísticos «había tenido un comportamiento muy positivo, como lo demuestra que en el período 2015-2018 el montante global de las inversiones superaran los 300 millones de euros anuales».

La directora general de la patronal de construcción explica que la pandemia «provocó un descenso, ya que el balance del año fue de 125 millones en el conjunto de todas las actuaciones». De cara a los próximos ejercicios, «una vez se acabe el efecto tirón de los proyectos visados y aprobados, la tendencia irá a la baja», afirma Verger. Los hoteleros y los touroperadores consideran vital para un destino vacacional tener una oferta de alojamiento moderna.