El alcalde de Maó, Héctor Pons junto a Fina Santiago, Francina Armengol, Susana Mora y Bàrbara Torrent, en la visita de las obras del nuevo geriátrico de Maó. | CAIB

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La presidenta del Govern, Francina Armengol, y la consellera de Asuntos Sociales y Deportes, Fina Santiago, acompañadas de la presidenta del Consell Insular de Menorca, Susana Mora, y del alcalde de Maó, Héctor Pons, han visitado este miércoles las obras de la nueva residencia para personas mayores en situación de dependencia, que se construye en el antiguo cuartel de Santiago, en el centro de Maó.

Se trata del primer equipamiento de servicios sociales de Balears que financia la Unión Europea a través del Fondo de Ayuda a la Recuperación para la Cohesión y los Territorios de Europa (REACT-UE). El coste previsto es de 10,3 millones de euros. Esta nueva residencia tendrá una superficie construida de 6.803 metros cuadrados, repartidos en planta baja, dos plantas piso y aparcamiento soterrado.

Dispondrá de 120 plazas, distribuidas en 96 habitaciones individuales y 12 dobles. La Conselleria de Asuntos Sociales y Deportes concertará las 120 plazas, que se integrarán dentro de la Red Pública de Atención a la Dependencia, por 3,1 millones de euros anuales.

Durante la visita, la presidenta del Govern ha afirmado que «en estos ocho años hemos tenido muy clara la necesidad de invertir en consolidación de derechos y de servicios públicos elementales como la atención a la dependencia, que tienen que ver con el futuro y con lo que se quiere proyectar como sociedad».

Francina Armengol ha recordado que desde 2015 «se han invertido recursos públicos como nunca en la historia en infraestructuras educativas, sanitarias, de ciclo del agua, destinadas a la transición energética y ligadas a la dependencia y la atención a la cronicidad».

Por su parte, la consellera Santiago ha asegurado que «la apuesta del Govern por la dependencia es una realidad» y ha explicado que en Menorca está en marcha una inversión de más de 23 millones de euros para residencias.

Asimismo, ha destacado que «las personas mayores tienen derecho a decidir cómo quieren envejecer y ser cuidadas» y, en esta línea, el Govern «ha crecido en teleasistencia, en ayuda a domicilio, en servicios de promoción a la autonomía y en ayudas económicas hasta triplicar las prestaciones que había en 2015».

Las obras empezaron en octubre de 2021 y la previsión es que estén terminadas a finales de 2023. Una vez acabadas, el Consell Insular de Menorca será el encargado de gestionar la nueva instalación.

En total, la Red Pública de Atención a la Dependencia ha ganado desde 2016 en Baleares un total de 650 nuevas plazas, a través de plazas cedidas por los ayuntamientos o por los consells insulares, así como mediante la concertación y los nuevos equipamientos. De estas, 46 están en Menorca, como la ampliación de la residencia de Ferreries, con 13 nuevas plazas.

Además, próximamente se sumarán las 120 plazas de la residencia visitada este miércoles, las 40 de Es Migjorn Gran, las 24 de la ampliación de la residencia de Sant Lluís y las 57 de la residencia de Es Castell.