Los caballistas reclaman al Consell que solucione las deficiencias y los peligros que presenta el Camí de Cavalls. | Katerina Pu

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Entidades, profesionales y aficionados al mundo de la hípica, consideran que la fama y la relevancia que ha adquirido el Camí de Cavalls no hace honor a su nombre, al menos en su totalidad. Y es que, según denuncian, el sendero que rodea Menorca sigue siendo impracticable o peligroso en muchos puntos, y en otros queda expresamente cortado el paso, sea por barreras con candados, por pórticos en L o con pasarelas no aptas para caballos.

Estas reivindicaciones vienen de lejos. De hecho, los últimos años, la Associació de Criadors i Propietaris de Cavalls de Raça Menorquina ha colaborado con el Consell para detectar los puntos que conviene mejorar para que el Camí de Cavalls sea, realmente, un trazado transitable para equinos. Pero «en realidad no se ha hecho casi nada», asegura el presidente de la entidad, Cristòfol Marquès. «Hemos visitado varios tramos, con técnicos y representantes» de la institución, pero las aportaciones caen en saco roto. «Clubes, empresas de rutas a caballo y particulares se quejan» del mal estado de algunos tramos y de actuaciones que dificultan el paso.

«Se han instalado pasarelas en playas y nos prohiben utilizarlas, pero no crean alternativas que, en realidad, son muy fáciles y baratas». Se refiere Marquès, a casos como el de Son Saura, donde reclaman que se delimite con una cuerda, al lado mismo de las tablas, un carril por donde puedan pasar caballos.

Seguridad y restricción de paso

«Hay tramos que son peligrosos», ya que el sendero transita al borde de precipicios, pero no se han habilitado pasos seguros. Esto sucede, por ejemplo, «entre el Pilar y Cavalleria; en Pregonda; en Sant Tomàs; en Sa Falconera, en Torre del Ram, que es un camino de cabras, no de caballos; o en ambos lados de Macarella», critica Marquès.

Asimismo, «los accesos a playas en forma de L dejan pasar bicis y peatones, pero no a los caballos», y en «parkings públicos como el de Cala Pilar pedimos que tengan una salida hacia el Camí de Cavalls».

Los portells o pórticos de madera de acebuche típicos de la Isla tampoco favorecen a los aficionados a lo ecuestre, «son muy bajos y es difícil abrirlos» con el jinete a lomos del animal. «Pedimos que sean más altos», añaden desde la asociación que fomenta la raza autóctona.

«Nos dicen que sí a las peticiones, pero luego, o por los técnicos, o porque es competencia de Costas o de Medio Ambiente, acaban sin hacer nada», señala Marquès. «Escribimos al Ministerio» para reclamar que se tengan en cuenta sus reivindicaciones, «y lo que han hecho es decirnos todo lo que han hecho», aunque no resuelva los problemas existentes.

«Al final, de caballos, lo único que tiene el camino es su nombre, porque los aficionados a la hípica no pueden utilizarlo como quisieran». Desde el colectivo insisten en pedir mejoras y no descartan emprender acciones reivindicativas.

Pasos rocosos y saltos peligrosos

En varios puntos, el Camí de Cavalls presenta relieves y desniveles que dificultan o impiden el paso de caballos. Cuando las soluciones son complejas, los aficionados al mundo del caballo reclaman itinerarios alternativos, que permitan esquivar estas orografías que entrañan peligro para los usuarios.

El obstáculo de los pórticos en L

Ejemplo de puerta que únicamente permite el paso de senderistas y ciclistas, pero no de caballos. Este tipo de accesos son habituales en muchos puntos del trazado, como en Cavalleria. Allí, la alternativa a las barreras cerradas son estos pórticos que impiden el paso de equinos.

Fincas públicas cerradas y sin alternativa

En fincas como Alfurí de Dalt, las barreras están cerradas a pesar de ser de titularidad pública.

Pasarelas que excluyen el paso de caballos

En la playa de Sant Tomàs, el espacio es escaso y se ha destinado exclusivamente al paso de peatones. Quedan así excluidos otros usuarios, como los que recorren el Camí de Cavalls a caballo. Para estos casos, se reclaman pasos alternativos que eviten que el sendero quede fragmentado.