Vista con altura de la multitud durante las últimas fiestas de Sant Joan, un caldo de cultivo perfecto para la propagación del virus. | G. ANDREU

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Flirt, la última de las múltiples mutaciones del virus causante de la covid-19 (SARS-CoV-2), está detrás de una nueva ola de contagios relacionada con las aglomeraciones de las fiestas de Sant Joan, en Ciutadella, donde solo el pasado 27 de junio en las Urgencias del centro de salud Canal Salat se detectaron 30 pacientes positivos.

Eso teniendo en cuenta, como explica la doctora Margarita Rodríguez-Loeches, directora de Atención Primaria, que en la actualidad no se practica la prueba de covid-19 a todos los pacientes, sino a aquellos que presentan síntomas más claros, con fiebre alta, problemas respiratorios, los mayores de 60 años y los que tienen patología asociada y comorbilidades.

La incidencia de las Infecciones Respiratorias Agudas (IRAS) alcanzó los 176,6 casos por 100.000 habitantes en Balears en la última semana de control de la red centinela, desde el 24 al 30 de junio, pero Menorca superó esa media balear en número de contagios, situándose muy por encima de la tasa de Mallorca, con más de 200 casos por cada cien mil habitantes.

Pese a que la vigilancia ahora se centra en todas las infecciones respiratorias agudas, que incluyen covid-19, gripe y el virus de la bronquiolitis, la realidad es que las tasas globales tanto de gripe como de Virus Respiratorio Sincitial (VRS) son próximas a cero, según el informe de Epidemiología, por lo que todos los contagios detectados son de SARS-CoV-2.

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Presente todo el año

«La covid-19 está presente todo el año mientras que la gripe y el VRS son estacionales, por lo que es lo que más está circulando ahora, aunque por suerte en la mayoría de los casos la enfermedad es benigna», señala la doctora Rodríguez-Coeches.

Los síntomas que provoca Flirt no son graves en una mayoría de casos y se pueden confundir con otro proceso infeccioso respiratorio como la gripe, aunque esta aparece entre octubre y febrero, por lo que es probable que ante un cuadro de dolor de garganta, cefalea, secreción nasal, fiebre, malestar general, tos e incluso diarrea, el diagnóstico sea de covid-19.

En cuanto a la otra gran infección respiratoria, también una epidemia típicamente estacional que tiene picos entre noviembre y febrero y que afecta sobre todo a los niños, la tasa de incidencia está a cero. La directora de Atención Primaria destaca, en cuanto al VRS, virus causante de bronquiolitis y también neumonía, la «muy buena cobertura vacunal en Menorca», con la protección suministrada a bebés el pasado otoño-invierno mediante el anticuerpo monoclonal Nirsevimab.

De siete a dos ingresados

La explosión de contagios, pese a que Flirt no parece causar una covid-19 más grave que las mutaciones que la precedieron, siempre se traduce en hospitalizaciones, aunque mínimas si se comparan con las que se registraron en plena pandemia. La semana pasada el Hospital Mateu Orfila tenía siete pacientes ingresados a causa de la covid-19, mientras que ayer esa cifra ya se había reducido a dos. Ninguno de los enfermos ha requerido atención en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). El mayor número de casos derivado de Sant Joan se diagnosticó los días 27 y 28 de junio, en las Urgencias de Canal Salat.

El jefe del servicio de Microbiología de Son Espases, Antonio Oliver, confirma que la subvariante Flirt, que pertenece a la familia de la variante Ómicron, se ha detectado en la mayoría de los pacientes que han sido ingresados por covid-19 en el último mes y medio en Balears. A finales de mayo aún no se había detectado en las Islas pero ahora avanza con rapidez.

El apunte

Es la segunda ola de mayor incidencia desde que finalizó la emergencia sanitaria

Desde que en mayo de 2023 la Organización Mundial de la Salud (OMS) dio por finalizada la emergencia sanitaria internacional por la covid-19, esta ola de contagios en Menorca ha sido la segunda en incidencia, después del pico que se registró en las pasadas Navidades. Los encuentros familiares y de Fin de Año derivaron en una tasa que se aproximó a los 300 casos por cada cien mil habitantes, mientras que Sant Joan de 2023 se quedó por detrás de las fiestas de este año en cuanto a contagios, no llegó a una tasa de 200 casos, cuando ahora se ha superado.