La bandera amarilla ondeaba ya ayer después de unos días con la enseña roja.

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Sa Platja Gran, de Ciutadella, se ha reabierto después de cinco días cerrada, tras las intensas precipitaciones que cayeron sobre el poniente insular el pasado martes. Fueron cerca de 40 litros por metro cuadrado en la zona urbana y hasta 100 en puntos como Torre d’en Quart.

Desde el martes, la cala ha permanecido cerrada al baño, según exponía ayer la concejal de Medio Ambiente, Maria Jesús Bagur, «por precaución». Y es que, añadía, al Canal Salat va a parar mucha agua cuando llueve, y «todo llega a la playa». Además, cuando hay grandes precipitaciones «las infraestructuras no dan abasto, se mezclan alcantarillado y pluviales» y es habitual que haya vertidos en el mar, procedentes del emisario situados en la bocana de la playa. Después de estos últimos días con bandera roja, los socorristas izaron a mediodía de ayer la amarilla.