El Hospital Mateu Orfila tiene déficit de médicos en diversas especialidades. | Gemma Andreu

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La declaración de plazas de muy difícil cobertura que entró en vigor en enero de este año para los especialistas de aparato digestivo en Menorca no ha conseguido atraer médicos para este servicio del Hospital Mateu Orfila. El incentivo económico aprobado por el Govern balear es de 924 euros más al mes, pero la dificultad para cubrir la plantilla autorizada, que es de cuatro digestólogos, persiste, y en la actualidad sigue al 50 por ciento, con dos profesionales, igual que cuando el IB-Salut reconoció el derecho a percibir un complemento salarial por la muy difícil cobertura de estos puestos, una asignación económica adicional que se prolongará hasta diciembre de 2027.

«No se ha captado a nadie», lamentó ayer el delegado del Sindicato Médico de Balears (Simebal) en Menorca, Claudio Triay, una situación muy distinta a la que se ha dado en el área sanitaria de Eivissa i Formentera con los especialistas de oncología, apuntó. Allí el plus mensual es más alto –empezó en mil euros y ahora está en 1.650 euros–, y sí parece haber inclinado la balanza a favor de Can Misses a la hora de que los galenos elijan destino. La declaración de muy difícil cobertura en Eivissa entró en vigor en octubre de 2023, debido a una situación muy precaria de oncología, con cinco plazas en plantilla pero en la práctica un solo especialista, debido a que estaban cubiertas dos y una estaba con una baja de larga duración. El incentivo económico ha funcionado y el Área de Eivissa i Formentera ha contratado en menos de un año a cuatro oncólogos, se ha pasado de tener que contar con la colaboración de internistas y de oncólogos desplazados de Mallorca a tener el servicio completo.

Las islas menores son las únicas que tienen la declaración de muy difícil cobertura para los médicos de aparato digestivo en Menorca y oncología en Eivissa.

Desplazados

La asistencia en el área de digestivo necesita por tanto recurrir al refuerzo de otros hospitales de Balears. En abril de 2022 se logró contratar a una doctora, Juliana Botero, pero en mayo de 2023 dejó el hospital.

Médicos especialistas se desplazan semanalmente desde Mallorca, de los hospitales de Son Llàtzer y Son Espases pero también de otros comarcales como el de Manacor, para apoyar a los dos especialistas que están en plantilla. Estos digestólogos de Mallorca se trasladan al Hospital Mateu Orfila los viernes, todo el día, y los sábados, por la mañana, para atender pacientes en consulta, realizar pruebas de gabinete de endoscopias y también para dar apoyo en las guardias. No es el único servicio que necesita reforzarse con médicos de otros hospitales del IB-Salut, sucede asimismo en cardiología. Hay déficit de plantillas también en anatomía patológica, hematología, medicina interna, y neurología.
La búsqueda de galenos por el IB-Salut es constante y muchas veces infructuosa. Las vacantes se anuncian en redes sociales y entidades médicas y científicas. La Sociedad Española de Endoscopia Digestiva es una de ellas, allí se ofrecen las dos vacantes permanentes, por traslado definitivo y jubilación, de los especialistas digestólogos, con contrato indefinido a tiempo completo, pero compite con una enorme demanda de médicos jóvenes tanto en España como en el extranjero.

Medicina interna

La petición de que se declare la especialidad de medicina interna como de muy difícil cobertura en Menorca continúa a la espera. El sindicato médico Simebal solicitó al IB-Salut dicho reconocimiento tanto para el área de aparato digestivo como para el servicio de medicina interna del ‘Mateu Orfila’ en noviembre de 2023. En diciembre de ese año se declararon de muy difícil cobertura únicamente las plazas de digestivo.

El apunte

«Los internistas damos apoyo a otras áreas y no se nos ha reconocido»

«Medicina interna cubre el déficit de otras áreas, como cardiología, oncología y cuidados paliativos y no se nos ha reconocido», afirma Jordi Guerrero, jefe de internistas en el Hospital Mateu Orfila. La declaración de muy difícil cobertura para la especialidad de aparato digestivo y no para la de medicina interna se ha visto por él y sus compañeros como «un agravio, una decisión injusta, unilateral y con poco diálogo con nosotros», asegura.
Guerrero ya advirtió en febrero de este año que el hospital no podía garantizar la cobertura de todas las guardias de 24 horas con internistas. Se requiere el apoyo de médicos de otras especialidades como nefrología, oncología y neumología. «Esto no es lo ideal, medicina interna tiene una visión más amplia y holística del paciente que otras áreas, más fraccionadas», explica. Pero es que además la situación ha empeorado en estos meses. Ahora ya son solo tres los médicos disponibles para hacer guardias de los ocho que tiene el servicio, cuando la plantilla autorizada es de diez médicos. A medida que avanza la edad, los profesionales pueden acogerse a su derecho a no hacer guardias; asimismo motivos de salud también pueden eximirles de un trabajo que altera su descanso y su sueño. Las guardias dobles, con dos especialistas, de los sábados y los lunes, cuando hay más pacientes, «han desaparecido», apunta. El jefe de medicina interna confía en una próxima incorporación de una especialista procedente de Venezuela y que ahora está en el proceso de homologación de títulos.