Una cuarentena de trabajadores públicos dedicados a la vigilancia, la inspección y la atención social han participado en una formación especializada sobre Control de Persona Agresiva organizado por el Consell insular. El objetivo es que estos empleados, que a menudo se enfrentan a situaciones conflictivas, aprendan a detectar estados de agitación para avanzarse, saber gestionar potenciales riesgos de agresión verbal o física, obtener estrategias para el encauzamiento de situaciones hostiles con técnicas de control verbal y, finalmente, en caso de que sea necesario, aprender a repeler la agresión y huir.
El curso se ha dividido en dos sesiones, una dirigida a los sectores de la vigilancia y la inspección, a la que han acudido 18 trabajadores del Consell y también del Govern; y la otra dedicada a los funcionarios del sector de los servicios sociales, con una participación de 21 personas entre empleados del propio Consell y de diversos ayuntamientos de la Isla. La acción formativa ha sido impartida por personal especializado e incluyó diversos módulos, empezando por una instrucción centrada en diferenciar entre la agitación y la agresividad, identificar las fases del proceso de las reacciones hostiles e intervenir de forma rápida para reconducirlas.
Asimismo, se trabajó en el llamado diálogo táctico y el control verbal, proporcionando herramientas emocionales y verbales para saber gestionar de forma efectiva las conversaciones en situaciones de hostilidad. El curso tuvo una vertiente práctica, con simulaciones realistas con alto contenido de estrés y permitió poner en práctica los conocimientos adquiridos. Con este tipo de formación continua el Consell pretende ayudar a la mejora del desempeño diario de sus trabajadores y darles apoyo formativo para saber afrontar situaciones complejas.
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Gran trabajo de formacion