El PSOE de Menorca alerta de que los pisos promovidos por PP y Vox no serán asequibles

Asegura que constituyen «un atentado contra el modelo territorial y turístico de Menorca»

Pepe Mercadal.

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El PSOE Menorca advirtió ayer de que las viviendas que el Govern pretende promover en Maó y Ciutadella, mediante los decretos pactados con Vox, se ofrecerán a precio de mercado, por lo que «será muy difícil que la mayoría de los menorquines, que hoy ya tienen dificultades para acceder a una vivienda, puedan comprarlas o alquilarlas», afirmó el diputado y futuro secretario general del partido, Pepe Mercadal. En esta línea, criticó que los dos decretos constituyen «un atentado contra el modelo territorial y turístico de Menorca, ya que permiten el incremento del número de plazas turísticas y la especulación urbanística».

El dirigente socialista afirmó en una nota de prensa que «con tan solo cinco días» quieren «cambiar por la puerta de atrás» el modelo «construido entre todos a lo largo de generaciones». Mercadal reprochó al presidente del Consell, Adolfo Vilafranca, porque «vemos que una vez más acata las directrices de la presidenta del Govern, Marga Prohens, y no es capaz de hacer valer su posición para defender el modelo de Menorca», manifestó, antes de añadir que «es un presidente paralizado, que no alza la voz ante un Govern balear que, imponiendo decretos ‘a la mallorquina’, destruye el territorio y lo cambia por la puerta de atrás».

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En su opinión, Vilafranca «debe tener voz propia y defender la isla como se merece». Según Mercadal, estas medidas «eliminan la moratoria turística y regularizan miles de plazas de alquiler turístico que se encuentran en el límite de lo legal, cuando se habría debido aprovechar la ocasión para limitarlas o eliminarlas». Además, el socialista subrayó que «permitirán construir bloques de pisos en suelo rústico en Maó y Ciutadella sin normas que garanticen que el precio de estas viviendas sea asequible».

En este contexto, Mercadal insistió en que «el PP y Vox utilizan la crisis de la vivienda como excusa para especular en suelo rústico y construir pisos que no serán para quienes sufren la crisis habitacional». «Se trata de una norma pensada para beneficiar a los promotores», concluyó.