Buzos y una gran grúa para sacar el coche hundido en el puerto Maó: lo que se sabe del accidente

La operación ha resultado compleja, puesto que un velero había atracado sobre el vehículo tras el espectacular accidente de la madrugada del domingo

Una grúa de grandes dimensiones ha recuperado el vehículo del fondo del mar | Foto: Gemma Andreu

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El vehículo, marca Hyunday Tucson, que en la madrugada del domingo se hundió en el puerto de Maó tras perder su control el joven conductor que lo manejaba ha regresado este lunes a la superficie, de nuevo, tras ser rescatado por una grúa de gran tamaño que lo ha sacado del fondo de las aguas en medio de una gran expectación en la zona central de la rada mahonesa.

Dos buzos de la empresa Menorca Sub lo amarraron bajo el agua por su eje delantero y en una operación lenta pero efectiva, la grúa depósito el automóvil sobre el asfalto para que otra de menor tamaña lo cargara y abandonara el lugar. Antes, fue necesario que el velero que, sorprendentemente, había atracado sobre el coche hundido, saliera de ese espacio para facilitar el trabajo de los buzos y de la grúa, lo que sucedió sobre las 11 de la mañana.

El automóvil mostraba el impacto en el capó y los bajos producto del accidente que, en todo caso, tuvo un final afortunado.

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El joven ecuatoriano de 21 años que lo conducía circulaba del andén de poniente hacia el de levante tras divertirse con sus amigos, cuando explicó a su padre que el acelerador se le bloqueó. «Su reacción fue levantar el freno de mano para evitar que chocara contra los coches aparcados a la derecha, y conseguir detenerlo chocando contra el murete, pero como es de tracción trasera y el piso estaba mojado, derrapó», ha explicado su progenitor.

Fue entonces cuando el coche derrapó, pasó por encima del murete que delimita la calzada del paseo junto al mar, arrancó una farola, una caja de luz y agua y un banco y cayó directamente al agua. Lo hizo justo en un hueco donde no había ningún barco amarrado, de ahí la fortuna porque de otro modo los destrozos hubieran sido mucho mayores y el joven quizás podía haber sufrido heridas debido al impacto.

Se agarró a un barco para alcanzar el muelle

Ya en el agua su primera reacción, ha indicado su padre, fue coger el móvil y salir «pero cuando vio que el coche se hundía salió rápido por la ventanilla». Se agarró a un barco que había al lado para alcanzar al muelle y estuvo a salvo. Al parecer nadie advirtió en ese momento el accidente pero minutos después la Policía ya le estaba intentando localizar al tener conocimiento de lo que había sucedido.

El joven, sin heridas, se marchó andando a su casa por la zona del Camí des Castell. «Cuando llegó le dije que andara a la Policía para decir lo que había pasado», añade el hombre. Así lo hizo tras cambiarse de ropa. En la Comisaría numerosos efectivos nacionales bajaron con el joven al puerto para señalizar el accidente mientras buzos de los bomberos confirmaban que ninguna otra persona había quedado atrapada en el interior.