A Menorca no llegan pateras pero sí cadáveres

De los más de 30 cuerpos que han aparecido en la costa de Balears, dos se han hallado en la Isla

En febrero de este año apareció un cuerpo en la playa de Sant Tomàs

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Más de una treintena de cuerpos sin vida de posibles migrantes han llegado hasta las costas de Balears a lo largo de los primeros cinco meses del año, la mayoría de ellos a Mallorca y casi un tercio solo el pasado mayo, según informa Europa Press.

No obstante, también en Menorca, donde apenas llegan pateras, se ha registrado la presencia de dos cadáveres, producto de esta coyuntura.

Son al menos 31 los cadáveres que han sido hallados en las playas del Archipiélago o flotando en el mar, según datos de la Guardia Civil. A ellos se le suma un resto humano que no se ha determinado si corresponde a alguno de los cuerpos localizados.

Identificar a estas personas es algo complejo, pues la gran mayoría de veces van indocumentadas y se encuentran en un estado de descomposición avanzado, pero es indispensable para poder notificar a sus familiares y seres queridos su defunción y, potencialmente, devolverles el cuerpo.

El hallazgo de esta treintena de cuerpos de posibles migrantes llegó el viernes hasta la Conferencia de Presidentes autonómicos celebrada en Barcelona.

Los cuerpos de posibles migrantes arrastrados por el mar han llegado hasta las cuatro islas. La que más casos suma es Mallorca, con 13. Otros 12 cadáveres han sido localizados en la costa de Formentera, cinco en Eivissa y dos en Menorca. Marzo, con ocho, y mayo, con hasta 11 cadáveres, han sido los meses más críticos en lo discurrido de 2025.

Solo se recuperan el 2 % de cuerpos de migrantes que se pierden en el mar

El de los migrantes fallecidos o desaparecidos en la ruta argelina no es un fenómeno nuevo –el colectivo Caminando Fronteras contabilizó 517 víctimas mortales durante el pasado año 2024– pero sí es más extraño que lleguen sus cuerpos hasta las costas de Balears. Según datos de la Cruz Roja, solo se recuperan cerca del 2 por ciento de los cuerpos de los desaparecidos.

Esto, según han explicado trabajadoras humanitarias habituadas a trabajar con estos casos, podría deberse a que naufragaran poco antes de llegar a tierra, pero también a las corrientes marinas.