El acusado, en un momento del juicio celebrado la pasada semana. | M.J.U.

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Cincuenta y seis días de trabajos en beneficio de la comunidad es la sentencia condenatoria que ha dictado el magistrado juez del Juzgado Penal, Bartomeu Mesquida, contra un joven de 25 años, quien amenazó a su madre colocándole un cuchillo en el cuello el pasado 24 de julio en el domicilio que ambos compartían en Alaior.

El juzgador ha considerado probada la acusación del fiscal y la abogada de la madre sustentada en el juicio celebrado el lunes de la pasada semana. Como consecuencia el joven, de nacionalidad española, deberá cumplir esa condena y además no podrá aproximarse a su madre a una distancia mínima de 100 metros ni tampoco comunicarse con ella durante los dos próximos años.

El testimonio de la madre fue veraz y coherente durante la vista oral, sin que hubiera venganza o resentimiento hacia su hijo. La mujer explicó la situación límite a la que había llegado por las discusiones con su hijo debido a su actitud laboral indolente, agravada por los problemas de la empresa familiar. Explicó que aquella tarde ya tuvieron una primera discusión por este motivo, que incluso llevo al hijo a amenazar con prender fuego a la nave de la empresa familiar y a cambiar la cerradura.

Su madre puso estos hechos en conocimiento de la Policía Local y cuando él supo la llamada a los agentes tomó un cuchillo de grandes dimensiones de la cocina y lo clavó en una pared del dormitorio de su madre.
Más tarde tuvieron un segundo enfrentamiento verbal cuando la madre le recriminó que hubiera hecho una compra elevada con cargo a la cuenta del negocio a pesar de la situación complicada en la que se hallaban. Fue entonces, cuando en el umbral de la puerta de la habitación del joven, este le colocó el cuchillo en el cuello. La mujer salió rápidamente de la casa en busca de la policía.

El acusado negó todos los hechos mientras que la declaración del padre, que también intervino en el juicio, resultó contradictoria, según el juez que ha acabado condenándole por un delito de amenazas en el ámbito de la violencia familiar.