El suceso ocurrió en un edificio de la calle Verge de Gràcia, de Maó. | Archivo

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Un hombre español de 42 años de edad tuvo que huir de su pareja debido a los golpes que ella le daba y lo hizo saltando por la terraza a la vivienda inferior de unos vecinos en un edificio situado en la calle Verge de Gràcia, de Maó, el pasado sábado entre las 19 y las 20 horas.

La mujer, presunta agresora, también española de 39 años, finalmente fue detenida por agentes de la Policía Nacional tras ser localizada por una patrulla de la Policía Local que la retuvo después del suceso cerca de la casa donde había tenido lugar el incidente.

La acusada ha quedado en libertad tras prestar declaración ante el juez, sin que se le hayan aplicado medidas cautelares hasta la celebración del juicio. Ella admitió haber agredido a su pareja con una bofetada, pero negó que el hubiera tenido que huir saltando por la terraza al piso inferior para evitar que continuara la agresión. Añadió, además, que el hombre la insultó durante la discusión aunque no llegó a ponerle la mano encima en ningún momento.

Fue la propia víctima la que dio el aviso a Emergencias cuando la mujer abandonó la casa después de agredirle y causar desperfectos en la vivienda arrojando varios enseres. También golpeó muebles y hubo rotura de cristales. Sin embargo, la mujer regresó poco después al domicilio, dijo, para recoger a la mascota. Entonces de nuevo se reprodujo su actitud violenta hacia su pareja quien para evitar una reacción agresiva y que recibiera más golpes, optó por huir saltando a la terraza de la planta baja y refugiarse en ella, como posteriormente constataría la propia vecina.

Al parecer cuando el hombre llegó a la casa la mujer le recriminó que lo hiciera tarde cuestionándole sobre sus compañías y el lugar de procedencia. El declaró que intentó calmarla pero ella comenzó a golpearle y a arrojar muebles al suelo.

El hombre diría a los agentes de la Policía Nacional que había recibido varios puñetazos en la cara, se quejaba de dolor en uno de sus oídos y presentaba, además, varios hematomas en uno de sus costados por lo que fue trasladado al Hospital Mateu Orfila en una ambulancia del 061 donde fue atendido de los golpes.