Hubo once agentes distinguidos pero pudieron ser más. | J. Coll

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«No ha habido mala fe, sino errores de interpretación por inexperiencia ya que era la primera vez que lo hacíamos», explicó ayer a este diario Pere Perelló, director general de Emergencias del Govern balear, y uno de los principales impulsores de las entregas de la Cruz al Mérito Policial que se han realizado estas últimas semanas.

En Menorca fueron distinguidos once policías a petición de las alcaldías de sus respectivos municipios siguiendo las propuestas de los mandos policiales.

Dado que hay otros agentes en la Isla que no fueron propuestos, la Agrupación Sindical de Policías Locales, vinculada a Comisiones Obreras, dirigió un escrito de protesta, al que se sumó una carta en este diario remitida por una agente de Sant Lluís que se sintió discriminada.

Perelló señala que ha habido un error de interpretación por algunos mandos al entender que no podían recibir la Cruz agentes que estuvieran en segunda actividad, cuando es incierto. En todo caso sí señala que «no todos los policías que han cumplido 30 años de servicio y tienen el expediente limpio han sido propuestos o tienen asegurada la Cruz». Depende de la valoración de los mandos que los proponen y de la tramitación del expediente en el que se nombra a quien lo defiende y quien lo matiza, ponente y contraponente.

En el caso de la agente de Sant Lluís, Ana Maria Llabrés, se ha tratado de un error del que la alcaldesa ya tiene conocimiento y será subsanado en una próxima ocasión ya que habrá una entrega de distinciones cada año.

Respecto a las dos agentes de Ciutadella, que también estaban en disposición de merecerlo por su antigüedad y hoja de servicios, Cati Pons Fraga y Mari Portella, y otra de Es Castell, Elena Gómez Guasp, el error procede de la misma interpretación por su situación de segunda actividad, que podrá ser reparado en una próxima convocatoria.

El sindicato, afirma su delegado, Ramón Silvela, interpreta que se trata de «disculpas que son excusas para no quedar mal porque si lo hubieran hablado antes esto no habría pasado». Fue un error que se ha de corregir, ha admitido también el jefe de Ciutadella, Ignasi Camps.

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Hubo once agentes distinguidos pero pudieron ser más. Foto: J. BAGUR