Una de las alarmas delató el robo que se produjo ayer por la tarde en el Museu de Menorca, donde un individuo se apoderó del Imhotep egipcio, una estatuilla de bronce de 15 centímetros que representa al dios egipcio de la Medicina. La directora del Museu de Menorca, Carolina Desel, fue alertada cuando saltó una alarma del recinto museístico, y esta, acompañada por una arqueóloga que trabaja en el Museu, se desplazaron hasta allí. Fue entonces cuando comprobaron que la pieza había desaparecido.
El robo se produjo el domingo por la tarde, cuando el museo estaba cerrado. Se ignora por qué no funcionaron todos los dispositivos de seguridad, solo el último sensor que detectó el movimiento justo antes de que el ladrón abandonara el recinto ya con su botín. Sí que funcionaron las cámaras de seguridad de la misma sala dedicada a la prehistoria, que grabó la escena de una persona. Se trata presumiblemente de una mujer, que accede a la sala, desprecinta el habitáculo de metacrilatode y en solo un minuto y medio consigue culminar lo que puede ser el robo más importante en la historia de Menorca.
Las pistas del delito
Seguramente se trata de una banda internacional especializada en robos de piezas artísticas de gran valor, que conocen el mercado en el que esta estatuilla podría alcanzar un precio de 3 millones de euros.
Una hipótesis es que la mujer que se llevó el Imhotep entrara sola en el museo, pero tuviera un cómplice fuera. La ladrona sería de baja estatura y muy delgada porque pudo acceder por una tubería de solo 40 centímetros de diámetro desde el puerto hasta el interior del edificio. De hecho, no se ha descubierto ni una sola ventana rota.
El Museo de Menorca ha anunciado que esta mañana pedirá la colaboración ciudadana por si alguna persona pudo ver algo sospechoso. De hecho, durante la tarde del domingo hubo una reunión de los cofrades de Semana Santa en la iglesia de Sant Francesc, colindante con el museo. Sin embargo, no hay muchas esperanzas de que aporten datos, ya que los cofrades ensayaban la procesión con los pasos y llevaban las cabezas cubiertas con los capirotes.
La directora insular de la Administración del Estado, Isabel López Manchón, ha anunciado que pedirá la colaboración de un inspector de la jefatura central, especialista en robos de piezas artísticas, que fue compañero de José Manuel Villarejo.
Lo más extraño es que en el poblado prehistórico de Torre d’en Galmés, donde se halló el Imhotep, ha aparecido tumbada la piedra superior de la Taula. La policía sospecha que quizás también intentaron robarla pero lo descartaron por su peso y por las dificultades de superar los controles de seguridad con un monumento de este tamaño.
