Los argelinos que llegaron a Menorca en patera. | Gemma Andreu

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Agentes de la Policía Nacional de Maó detuvieron la noche de este lunes a cuatro de los seis inmigrantes argelinos que permanecían en la Isla tras haber llegado en patera a la costa de Sant Lluís el pasado día 13.

La detención responde al trámite exigido una vez la Delegación del Gobierno en Balears ha firmado el expediente de repatriación de estas personas cuyo propósito era llegar a Bruselas.

Una vez que el organismo del Estado ha recibido la información de la existencia de plazas disponibles en el Centro de Internamiento de Extranjeros existente en Madrid, el proceso pasa por su nueva detención para que declaren ante el juez de guardia, probablemente, este miércoles como paso previo a su traslado al CIE de Madrid, desde donde se producirá su repatriación a Argelia.

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Este paso no pudo llevarse a cabo a su llegada a la Isla porque entonces no había plazas disponibles en ninguno de los siete CIEs existentes en España. Ese fue el motivo de que quedaran en libertad y contaran con el apoyo de la Cruz Roja de Maó y los servicios sociales del Ayuntamiento que les han proporcionado alojamiento y manutención desde entonces.

En la Isla permanecían ocho de los 10 argelinos que llegaron en patera. Los dos menores de edad seguirán instalados en la Casa de la Infancia, otros dos adultos abandonaron la isla por su cuenta dos días después de quedar en libertad. Y los otros dos inmigrantes no se encontraban en la casa de acogida de Maó cuando la Policía Nacional fue anoche a buscarlos y detuvo a los cuatro que sí se encontraban allí. Es posible que hayan conseguido abandonar la Isla también por su cuenta.

El grupo había intentado salir de Menorca en barco, en dirección a Barcelona hace una semana y el domingo, rumbo a Valencia, pero en ambas ocasiones el capitán del barco de la compañía Trasmediterránea impidió su embarque al estimar que su documentación no era suficiente, aunque todos tienen una certificación provisional para circular con toda libertad por el país. El máximo responsable indicó que para permitir su embarque tenían que hacer el viaje custodiados por la Policía.