Los tres detenidos pasaron por los calabozos de la Comisaría de Maó.

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La Policía Nacional de Maó ha practicado tres detenciones en los últimos días a tres hombres acusados de los delitos de lesiones, maltrato a su expareja, y en el tercer caso, amenazas a agentes de la autoridad.

El primero de los detenidos es un hombre de 32 años por presunta agresión a otro hombre al que persiguió a la salida de un local en la calle Miquel de Veri después de que ya se hubiera ensarzado con él en el bar, con la intervención de otras personas.

Al parecer el hombre le intentó alcanzar con una botella para golpearle cuando le perseguía por la calle. Finalmente le dio alcance y en la disputa le provocó la rotura de un dedo. En la trifulca participaron otros conocidos de los dos protagonistas principales, aunque finalmente la Policía Nacional ha practicado una detención a partir de la denuncia presentada por la víctima que tuvo que ser atendida en el Hospital Mateu Orfila de los golpes recibidos y la fractura en la falange de uno de sus dedos.

La segunda detención tuvo lugar el pasado sábado en un domicilio del centro de Maó. Una mujer denunció al que había sido su pareja por maltrato psicológico. La Policía Nacional abrió una investigación que concluyó con el arresto del individuo, de 50 años de edad.

Llama al 112 y acaba detenido

En cuanto al tercer detenido, fue arrestado por los agentes del CNP durante la madrugada del pasado domingo. Se trata de un hombre de 47 años que ha acabado siendo acusado por los delitos de amenazas a los propios policías, y daños al vehículo patrulla que lo transportaba a la comisaría tras su detención.

Al parecer el individuo llamó al servicio de Emergencias 112 denunciando que su mujer no le abría al puerta por lo que no podía entrar en su casa cuando regresaba, de madrugada, con claros síntomas de haber ingerido bebidas alcohólicas.

El hombre denunciaba que su mujer no le abría porque estaba con otro individuo, y que estaba dispuesto a acuchillarla. Emergencias pasó el aviso a la Comisaría de Policía y cuando    los agentes llegaron al domicilio señalado, comprobaron que el hombre ya estaba en el interior de la casa y los recibió con aires desafiantes. El hombre, entonces, intentó escapar por lo que los agentes tuvieron que interceptarle y detenerle mientras él forcejeaba y se revolvía para evitar su detención.

Una vez neutralizado, ya en el trayecto hacia las dependencias policiales el hombre, con antecedentes por hechos similares, causó destrozos en el coche.

Los tres detenidos fueron puestos a disposición judicial y quedaron en libertad provisional hasta la celebración del juicio.