Los almacenes y las tiendas cuentan con estocs suficientes. | Gemma Andreu

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Estas Navidades habrá con seguridad juguetes para todos. Lo que no está garantizado, sin embargo, es que se puedan conseguir los productos deseados. Así, si otros años ya había dificultades para encontrar determinados productos estrella, este año todavía costará más, a causa de los problemas que arrastra el transporte, que está provocando ya retrasos de un mes en las entregas y elimina cualquier posibilidad de reposición de cara a las próximas semanas.

Distintas jugueterías de Menorca tranquilizan al respecto, asegurando que en sus almacenes hay suficientes juguetes para la campaña navideña. Eso es así porque «trabajamos con mucha antelación y tenemos estocs potentes», afirma Nina Marquès desde las instalaciones de Toy Planet. Aún así, «es posible que no lleguen algunas novedades y artículos del catálogo». De hecho, «tenemos retrasos de un mes», periodo que concuerda con el que indica Joana Torres, de Juguettos. «Ponemos todas nuestras energías para que los pedidos lleguen a tiempo, pero ya tenemos retrasos de un mes, debían llegar a finales de octubre y lo harán a finales de noviembre». En este sentido, «si el transporte ya es de por sí un problema en Menorca, ahora lo es todavía más».

En la misma línea, Catalina Riudavets, responsable de la juguetería La Valenciana, recuerda que «no es nuevo que se agoten determinados juguetes, lo único es que este año se triplicará» el problema.

Precios disparados

Las jugueterías afrontan otro problema, el incremento desmesurado de precios en el transporte. «A finales de 2019, traer un contenedor de China costaba 1.600 dólares; ahora cuesta 16.000», cuantifica Torres, quien lamenta, por otro lado, el origen asiático de las mercancías. «Hace cuarenta años, el 99 por ciento venía de la zona de Levante; hoy en día, los centros logísticos son internacionales y el 99 por ciento llega de China».

Por otro lado, Riudavets pone el acento en el fenómeno de la falsa demanda, por el cual «varias personas de la misma familia preguntan por un producto, pero en realidad es para un mismo niño». Esto provoca mayor sensación de falta de artículos de la que en realidad hay.