Los motoristas se reunieron a primera hora de la mañana de ayer en Es Mercadal | Motos Clàssiques Menorca

TW
0

El grupo Motos Clàssiques Menorca ya tiene una nueva actividad que añadir a su calendario. Un colectivo que ya ha celebrado concentraciones en torno a motocicletas de las marcas Vespa    o Bultaco, y al que ahora suma un de los modelos más icónicos de la ya extinta firma Montesa: la Impala.

Los amantes de ese moto se hacen llamar «impalistas» y las concentraciones se conocen popularmente como «impaladas». Y ayer tuvo lugar la primera de Menorca, justo ahora que se cumplen 60 años de que se pusieran a la venta el modelo. Estamos hablando de una motocicleta de éxito que se convirtió en todo un referente dentro del campo del motor sobre dos ruedas y que conserva todavía un gran número de fieles.

Una quincena de propietarios se citaron ayer por la mañana en el aparcamiento de la Sala Multifuncional de Es Mercadal. Miquel Gomila, miembro del grupo y uno de los impulsores de la iniciativa, apunta que de momento el número no importa, ya que tienen el convencimiento de que la familia irá creciendo con el paso del tiempo.Saben a ciencia cierta que en la Isla hay bastantes más motos de ese modelo y los planes es que en futuros encuentros se desplacen hasta Menorca motoristas de fuera de la Isla.

Tras hacer una ruta que transcurrió por Es Migjorn Gran, Ferreries y Cala Galdana, finalizaron en Ciutadella, donde celebraron una comida de hermandad.

Gomila, coleccionista de motos antiguas, asegura que llevar una Impala implica «otro concepto de conducción; es algo diferente, en ella te sientes muy seguro, sabes que no te va a fallar y es fácil de conducir», resume. Una de las grandes ventajas para los amantes de este modelo, añade, es que por suerte resulta fácil encontrar piezas de repuesto en el mercado de segunda mano para tenerlas siempre a punto.