En un bosque de Polonia existe una remota aldea judía, cuya existencia ignora la administración estatal y que por esta razón escapó milagrosamente de la Segunda Guerra Mundial y del holocausto nazi. Kreskol es un villorrio donde sus habitantes no conocen ninguno de los inventos modernos y viven conformados al ritmo y la mentalidad de siglos pasados y bajo el gobierno del consejo de rabinos. Ni siquiera saben hablar polaco y su lengua es el yidis.
“La aldea perdida”, una fábula de enredo en la que destaca la peripecia de algunos personajes
El villorrio que escapó de la historia
También en Opinión
- Crece la presión sobre las playas de Menorca: así se reparten los 31.500 bañistas en un día de verano
- Semana Santa en Menorca: estos son los horarios y recorridos de las procesiones pueblo a pueblo
- Un reparto desigual: de la saturación de Macarelleta a los 268 metros por bañista de Sa Torreta de Es Grau
- Olas de casi 10 metros alteran las rutas marítimas en el arranque de Semana Santa
- Así son las nuevas motos de la Policía Local de Maó que han costado más de 25.000 euros
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.